Cómo prepararte para cumplir tus propósitos laborales de 2017

Todos hemos escuchado que diciembre es un mes perdido para emprender cualquier acción laboral, porque empleadores y empleados quieren un receso y retomar, si existen, contrataciones para el siguiente año.

Esto se ha convertido, con base en mi experiencia, en el mito de la ‘peor época del año’, y que se traduce en pensar que por ser cierre anual es imposible encontrar una oportunidad o hacer algo para convertirse en un elemento profesional más ‘apetecible’ para el mercado.

La pregunta es si, ante el escenario laboral actual, es válido seguir el mito del receso profesional por temporada. Tal vez un par de cifras permite reformular la respuesta:

Este 2016 redescubrimos, aunque no era algo nuevo, que en un entorno laboral tan competitivo no hay espacio para recesos, o para meses perdidos.

Los especialistas en educación dicen que el futuro consiste en centrar la responsabilidad de preparase en el propio individuo. En una frase más cotidiana, Steve Jobs solía decir que la diferencia entre el emprendedor exitoso de quien no triunfa es la disciplina. ¿Cómo activar esa disciplina y en torno a qué proyectos en 2017?

Año nuevo no significa pasar por alto que en muchas empresas el inicio de año es sinónimo de reajuste, de replantear presupuestos, lo que representa demora o ‘reserva’ para ejercer nuevos proyectos o contrataciones.

Tampoco es cerrar los ojos a que las organizaciones necesitan repensar sus esquemas para conservar a los colaboradores. Es, de fondo, una invitación para que, sin importar el área donde estés, se empiece 2017 con otra perspectiva, donde el cambio personal se convierte en el mayor reto.

Para tomar la batuta del desarrollo, hay acciones a emprender, desde ya, y no el 2 de enero de 2017, cuando otros quizá lleven ventaja:

1. Reactiva la conexión profesional. Estas fechas son punto de partida para comenzar o actualizar la red de conexiones profesionales. Se puede aprovechar los eventos sociales -propios de temporada- o hacer una base de las personas que se contactaron en el año a través de cursos, eventos, redes sociales. Es momento, también, para actualizarse en esquemas que están impulsando las redes para generar perfiles más atractivos, como preparar una carta de presentación profesional.

2. Renovar el perfil profesional. Sorprendería saber que 31% de los mexicanos sólo recurre a las bolsas de trabajo en línea cuando no tiene trabajo, de acuerdo con datos de Bumeran.com. ¿Y si mañana hubiera un cambio abrupto en el empleo?

La consigna es, y no hay vuelta de hoja, que es importante permanecer visible en el mercado laboral todo el tiempo, aun cuando se tenga un trabajo fijo. Visto en acciones concretas, esto significa: renovar CV, subirlo a Internet, grabar un video currículum, buscar ferias virtuales, actualizar el perfil en redes, participar en comunidades profesionales en línea, entre otras actividades.

3. Planear 2017. Cuando se identifican objetivos profesionales SMART-S (específicos, medibles, alcanzables, con fecha de cumplimiento, y son compartidos), y estos, a su vez, se convierten en un plan de carrera, la persona tiene oportunidad de crear movimientos laborales -como ascensos- en tres años en promedio, dice un estudio del Centro de Carrera, de la Universidad de Berkeley. Independiente a esta cifra, ¿por qué no empezar el año con un plan de dónde estás a nivel profesional ahora y dónde quieres estar en 2017?