Estos 7 factores están remodelando el panorama manufacturero mundial

Este año, más de 2000 millones de personas emitieron su voto en elecciones celebradas en 50 países, lo que resultó en cambios significativos alejados de los partidos oficialistas, impulsados por una combinación de desafíos económicos y descontento posterior a la pandemia. Esta tendencia estuvo acompañada de promesas para acelerar una amplia gama de políticas destinadas a redefinir el comercio global mediante aranceles y controles a las exportaciones, lo que pone la responsabilidad de adaptarse en los líderes de las cadenas de suministro. Al mismo tiempo, con la intensificación de los conflictos globales en regiones como Europa y Medio Oriente, las prioridades cambiantes en sostenibilidad y la rápida adopción de tecnologías transformadoras como la inteligencia artificial, los líderes de las industrias manufactureras deben enfrentarse a un panorama cada vez más complejo al evaluar cómo optimizar sus cadenas de valor.

Los patrones comerciales también están cambiando drásticamente. En 2023, se impusieron cerca de 3000 medidas restrictivas al comercio, casi el triple que en 2019. Esta dinámica se refleja en la reconfiguración de las fuentes de importación para Estados Unidos. En 2023, México superó a China como el principal exportador hacia Estados Unidos, un cambio que se alinea con tendencias más amplias en los flujos globales de inversión extranjera directa (IED), marcados cada vez más por rivalidades geopolíticas crecientes.

Este aumento en la intensidad y frecuencia de las disrupciones globales se suma a la brecha que enfrentan las organizaciones manufactureras entre la intención estratégica de reconfigurar las cadenas de valor y la realidad operativa de su implementación.

¿Qué buscan los fabricantes a nivel país? Las estrategias centradas en las empresas y las colaboraciones con proveedores pueden avanzar considerablemente. Sin embargo, un enfoque multiactor en el proceso de reconfiguración de las cadenas de valor requiere alineación y colaboración con el sector público. A medida que los fabricantes reevalúan su presencia y sus estrategias de red, la tendencia de tomar decisiones sobre dónde establecerse basadas únicamente en costos está evolucionando hacia un proceso más complejo, en el que se considera la preparación de un país para ofrecer un entorno que se alinee con las prioridades estratégicas.

Una encuesta realizada por el Foro Económico Mundial y Kearney, que involucró a más de 300 ejecutivos de operaciones globales y 60 consultas (capturada en From Disruption to Opportunity: Strategies from Rewiring Global Value Chains), destaca que la brecha entre la intención y la ejecución operativa es evidente en cinco tendencias. Estas tendencias incluyen: un cambio hacia centros más regionalizados; una transición a un modelo de operaciones digital-first; la adopción de enfoques más innovadores en sostenibilidad; un enfoque más profundo en habilidades; y el valor para el cliente.

Sobre esta base, un informe reciente del Foro Económico Mundial en colaboración con Kearney resalta siete factores clave de preparación a nivel país, que las empresas industriales globales están analizando detenidamente al tomar decisiones de asignación de capital para el futuro de las operaciones de manufactura y cadenas de suministro:

Una infraestructura sólida es un pilar del crecimiento industrial. Requiere un enfoque equilibrado tanto en la infraestructura física, como redes de transporte y logística, como en la infraestructura inteligente, que incluye conectividad digital y tecnológica. Un enfoque integrado para desarrollar ambas se está convirtiendo en una prioridad crítica para los países que buscan atraer inversiones globales. El New Industrial Master Plan 2030 de Malasia 2030 integra infraestructura física e inteligente a través de iniciativas como la Estrategia Nacional de Semiconductores (NSS, por sus siglas en inglés). La NSS ha comprometido 5300 millones de dólares para construir nuevos parques industriales, invertir en capacitación tecnológica y crear alianzas con actores industriales como Nvidia e Intel, con el objetivo de posicionar al país como un destino de manufactura.

Con recursos naturales finitos, las organizaciones industriales están priorizando cada vez más a los países que demuestran un compromiso con la diversificación de su matriz energética. Esto incluye la adopción de fuentes de energía renovable, la promoción de la eficiencia energética y la incorporación de principios de economía circular para mejorar la sostenibilidad a largo plazo. Países como Singapur han asumido un papel proactivo de liderazgo al asociarse con organizaciones industriales, comprometiéndose a suministrar energía renovable para complementar lo que las instalaciones no pueden producir de manera independiente, como la energía solar. Esta estrategia respalda tanto los objetivos climáticos nacionales como los del sector privado y garantiza un camino confiable hacia las emisiones netas cero.

Como motor de la competitividad global, la tecnología es una consideración clave para las empresas. Las compañías están evaluando de cerca la fortaleza del ecosistema de innovación de un país, el ritmo de adopción tecnológica en diversas industrias, incluidas las pequeñas y medianas empresas, y la solidez de las protecciones de propiedad intelectual para garantizar un crecimiento justo y seguro. Por ejemplo, Israel se ha establecido como líder en tecnología avanzada al invertir más de 50 000 millones de dólares en Intel para desarrollar instalaciones de fabricación e I+D de vanguardia. Esta asociación ha posicionado a la empresa como el mayor empleador del sector privado del país, proporcionando empleo a alrededor de 11 700 personas y contribuyendo con el 1,75% del PIB nacional.

La agilidad de la fuerza laboral es fundamental en una era de rápido avance tecnológico. Esto incluye evaluar los niveles de habilidades de los trabajadores, la flexibilidad y retención del trabajo, y la disponibilidad y costo del talento calificado. Los países que priorizan la actualización continua de habilidades y el desarrollo de talento son cada vez más favorecidos por los inversionistas globales. Tamil Nadu, en India, ha ampliado eficazmente su fuerza laboral manufacturera al asociarse con el sector privado para aumentar el empleo femenino. Estos esfuerzos van más allá de ofrecer oportunidades educativas y de desarrollo de habilidades, e incorporan apoyos como instalaciones de cuidado infantil, transporte seguro y viviendas asequibles cerca de los parques industriales. Este enfoque integral ha hecho que la industria manufacturera sea más accesible e inclusiva, lo que ha resultado en que Tamil Nadu albergue más del 40% de la fuerza laboral manufacturera femenina de India.

En medio de la creciente volatilidad global, que incluye aranceles, políticas proteccionistas y presiones inflacionarias, los fabricantes están priorizando a los países con marcos fiscales y regulatorios transparentes y predecibles. Políticas fiscales claras, regulaciones simplificadas y acceso al capital son clave para permitir un crecimiento sostenible y mitigar las disrupciones comerciales. Los marcos regulatorios simplificados y los incentivos fiscales de México desempeñaron un papel fundamental para asegurar la inversión de Audi en la construcción de la planta de San José Chiapa. Esta asociación ha dado lugar a la creación de más de 5300 empleos y la producción de casi 200 000 vehículos el año pasado.

Los países que equilibran eficazmente los intereses nacionales con la colaboración global se están volviendo más atractivos para las organizaciones industriales. Las consideraciones clave incluyen la estabilidad de las políticas comerciales, el impacto de los desarrollos políticos y la solidez de las relaciones internacionales, incluidas las alianzas y asociaciones. El Acuerdo de Libre Comercio entre la Unión Europea y Vietnam (ALE) ha logrado equilibrar los intereses nacionales con la integración global, lo que ha llevado a un crecimiento del 50% en las exportaciones vietnamitas hacia la Unión Europea. Este acuerdo comercial no solo ha ampliado el acceso al mercado, sino que también ha diversificado los socios de la cadena de valor, agregando resiliencia a través del comercio global.

La resiliencia económica a largo plazo depende cada vez más de prácticas sostenibles. Las empresas están analizando el compromiso de los países con los objetivos de emisiones netas cero, las iniciativas de responsabilidad social y el cumplimiento de normas de gobernanza sólidas para asegurar su alineación con los criterios ESG (environmental, social and corporate governance) en evolución. A nivel nacional, la política de Economía Circular de los Países Bajos de 2016 tiene como objetivo reducir el uso de materiales primarios en un 50% para 2030. Este objetivo se apoya en inversiones sustanciales en la industria y la promoción de prácticas circulares entre empresas y consumidores. Al fortalecer los estándares e incentivar la producción sostenible, los Países Bajos se están posicionando para alcanzar sus objetivos climáticos a largo plazo.

La importancia de estos factores varía según la empresa, la industria y la posición a lo largo de la cadena de valor. Si bien ayudan a crear un entorno favorable, no son los únicos determinantes de la atractividad de un país como destino de manufactura. Otras consideraciones, como la competitividad de costos, el acceso al mercado y las prioridades políticas, también juegan un papel significativo en la toma de decisiones de inversión.

A medida que las organizaciones industriales continúan trabajando para equilibrar costo, resiliencia, sostenibilidad y rendimiento en sus procesos de reconfiguración, los líderes del sector público y privado tienen el imperativo de trabajar juntos para modelar las condiciones y políticas que permitan el crecimiento responsable de la industria manufacturera para el bienestar social, económico y ambiental. Centrado en los pilares de las personas, la prosperidad y el planeta, estos siete factores de preparación son los cimientos para un futuro equitativo a través de las cadenas de valor y en países desarrollados y en desarrollo.