Mis cinco claves para un crecimiento sostenible

Periodistas, políticos y ciudadanos comunes han pasado mucho tiempo en los últimos años, discutiendo el "sueño chino". Es nuestra visión del viaje de China hacia el futuro.

Para mí, el sueño chino nos hace romper el vínculo entre el aumento de los ingresos, el aumento de la producción y la degradación del medio ambiente. Nuestras empresas deben seguir creciendo incluso a medida que nuestras ciudades, tierras de cultivo y ecosistemas completos se vuelven más verdes y sostenibles.

La creación de riqueza a largo plazo debe ir de la mano con la sostenibilidad. A principios de este año, Lyu Jun, presidente de COFCO Corporation, describió cómo el aspecto comercial para la producción sostenible se está quedando atrás del moral. Desde que se publicó su artículo como parte de la Reunión Anual del Foro Económico Mundial 2019, COFCO ha demostrado activamente el valor comercial de la sostenibilidad.

En Julio, nos asociamos con un grupo de 21 bancos para recibir un préstamo de USD 2.3 mil millones, como nuestra principal fuente de financiamiento. Bajo los términos de este préstamo, pagamos una tasa de interés más baja si podemos cumplir una serie de objetivos anuales de sostenibilidad. Cualquier interés ahorrado se reinvertirá en iniciativas que aumenten aún más nuestro rendimiento en sostenibilidad. La sostenibilidad nos genera dinero.

Este préstamo demuestra algunas de las claves del crecimiento sostenible. Aquí hay cinco de ellos:

La política gubernamental y las preferencias de los consumidores ciertamente pueden cambiar el comportamiento corporativo, como lo demuestran los precios de la soja. La mayoría de las empresas orientadas al consumidor se están adaptando a las preferencias de mayor sostenibilidad.

Pero veo un papel más interesante para los bancos, cuya influencia es inmensa. El sector financiero está cambiando rápidamente hacia la sostenibilidad a medida que se hacen evidentes los vínculos con la reducción del riesgo y un mejor desempeño financiero. En la primera mitad de este año, la emisión de préstamos vinculados a la sostenibilidad saltó 63 por ciento a USD 44,000 millones, tanto como en todo 2018. El dinero habla.

Si bien el sector público tiene recursos de financiación limitados, la inversión privada y la capacidad podrían desempeñar un papel fundamental en el logro de los objetivos de desarrollo agrícola sostenible. Pero los niveles actuales no son suficientes para enfrentar los desafíos globales de seguridad alimentaria a largo plazo. Los inversores privados siguen siendo reacios a invertir en una agricultura sostenible debido a las incertidumbres percibidas y los altos riesgos. Además, los modelos de financiación convencionales tienen sus límites, particularmente en los países en desarrollo, de donde vendrá la mayor parte del crecimiento de la demanda y la producción de alimentos.

Necesitamos una financiación más innovadora en la que los sectores público y privado puedan trabajar juntos, para crear el entorno político y de inversión necesario para la financiación privada en la agricultura sostenible.

Deberíamos buscar nuevas ideas en el sector de las energías renovables, donde las asociaciones público-privadas (APP) han entregado con éxito mecanismos para agrupar el financiamiento público y privado y la mitigación de riesgos.

Puede que a las personas no les guste el cambio, pero les gusta la innovación. A las personas no les gusta renunciar a las cosas, pero les gusta tener nuevas opciones. La innovación es la respuesta. Es esencial cambiar.

Encontrar soluciones a menudo es fácil. Implementarlas es más difícil. En teoría, todo el mundo quiere un sistema alimentario más sostenible. Pero no todos quieren o pueden pagar el precio. Es por eso que un cambio sostenible requiere que incorporemos a todos los afectados. Para lograr una cadena alimentaria sostenible, los agricultores y productores pueden necesitar más incentivos.

El considerable proyecto de Grain for Green de China ofreció cereales, impuestos y otros incentivos para que los agricultores protejan sus bosques en lugar de talarlos.

Y los agronegocios serán sabios al adoptar el mismo principio. La agricultura sostenible solo será posible si los agricultores participan de este proyecto.

El presidente Xi ha sido consistente con la necesidad de políticas verdes "para proteger el hogar común en el que vivimos". Su posición también es consistente con la historia china reciente, que nos enseña que solo la agricultura sostenible puede brindar una seguridad alimentaria significativa.

Entre 1978 y 2015, China invirtió un total de USD 378.5 mil millones en 16 programas principales de sostenibilidad, la mayoría en los últimos 20 años. La inversión involucró a más de 500 millones de personas y supera con creces cualquier otro programa nacional de sostenibilidad. En el aspecto comercial de la sostenibilidad, China está ahora a la vanguardia de la tecnología solar, el transporte con bajas emisiones de carbono, la economía circular y el comercio de carbono entre otros. Nos tomamos en serio la sostenibilidad.

La urgencia de nuestra biodiversidad y de las crisis climáticas significa que necesitamos tener urgente soluciones implementadas. Y estas soluciones deben estar a escala.

El préstamo vinculado a la sostenibilidad mencionado anteriormente no es el primero en el sector comercial agrícola, pero es el más grande hasta ahora. Demuestra nuestra intención de unirnos con otros en nuestra industria y contribuir al crecimiento sostenible en el sector agrícola global. Eso es parte del sueño chino.