La transición hacia la movilidad sostenible no es equitativa. Estos 3 CEO quieren cerrar la brecha

La movilidad por carretera representa aproximadamente una cuarta parte de las emisiones mundiales de carbono del sector de energía y va en aumento, por lo que su descarbonización es fundamental para mitigar la crisis climática mundial. Los automóviles representan la mayor parte de las fuentes de emisiones en aumento a nivel mundial, lo que hace atractiva la transición hacia las emisiones cero del tubo de escape, especialmente para los vehículos eléctricos (VE) en los mercados desarrollados.

No es de extrañar que los principales mercados desarrollados se comprometieran a eliminar progresivamente los vehículos con motor de combustión interna y las inversiones en cadenas de valor de vehículos eléctricos. Afortunadamente, a pesar de las disrupciones en la cadena de suministro, las crisis geopolíticas y los elevados precios de las materias primas y la energía, las ventas de vehículos eléctricos (híbridos y puros) superaron los 10 millones el año pasado, un 55 % más que en 2021.

Sin embargo, no todos los mercados pueden electrificar su parque automovilístico al ritmo que exige la crisis climática. En varios mercados emergentes, la propiedad de automóviles sigue siendo bastante baja, pero las ventas están creciendo. Es necesario considerar la movilidad de forma holística para adoptar un enfoque más matizado y colaborativo.

China, Europa y Estados Unidos representaron alrededor del 95% de las ventas mundiales de autos eléctricos en 2022. Las economías emergentes y en desarrollo fuera de China representan solo una fracción de los mercados mundiales de VE.

En muchas de las principales economías emergentes y en desarrollo, el transporte sigue basándose en gran medida en soluciones de movilidad más pequeñas en los centros urbanos, como los vehículos de dos y tres ruedas, y en la movilidad compartida para los desplazamientos regionales.

En 2021, los vehículos eléctricos de dos y tres ruedas evitaron la utilización de un millión de barriles de petróleo al día, es decir, el 66 % del desplazamiento de la demanda total de petróleo por parte de los vehículos eléctricos en ese año, lo que hace que la electrificación de este segmento sea más importante a nivel mundial de lo que muchos imaginan.

Incluso en los grandes mercados automovilísticos del mundo emergente, a los gobiernos les resulta más atractivo invertir en el montaje y la fabricación de vehículos y piezas en los que puedan tener una ventaja relativa duradera.

El Foro Económico Mundial preguntó a tres CEO y altos ejecutivos su opinión sobre este reto. Esto es lo que dijeron:

K N Radhakrishnan, Director y CEO de TVS Motor

Los vehículos de dos ruedas son el medio de transporte más importante en varios mercados emergentes de Asia y África, siendo la India el mayor mercado mundial de este tipo de vehículos. La transición energética en la movilidad en muchos mercados emergentes, incluida la India, se hace sobretodo por la adopción de vehículos eléctricos de dos ruedas.

Impulsado por las ventas de vehículos eléctricos de dos ruedas, el ritmo acelerado de adopción de vehículos eléctricos en la India triplicó los volúmenes de la industria en 2022, y el crecimiento continuará en 2023. Este crecimiento se ha visto impulsado, en parte, por el apoyo prestado en forma de incentivos por los gobiernos nacionales y subnacionales de la India.

El Gobierno está impulsando la adopción acelerada de los vehículos eléctricos y los fabricantes de equipos originales (OEM) están respondiendo con inversiones en tecnología y creación de capacidad para ayudar a hacer realidad esta visión.

Además de impulsar el crecimiento, durante 2022-23 se produjeron intervenciones políticas y normativas coherentes por parte del gobierno para garantizar estándares de calidad y mayores niveles de seguridad de los vehículos eléctricos de dos ruedas para los consumidores.

Esto ha llevado a la formalización de la industria, y el resultado es una mezcla de productos, que ha pasado de las opciones de baja calidad y bajo coste, a favor de las ofertas que cumplen los requisitos de calidad y seguridad.

La mejora de las normas de seguridad, localización y calidad tiene un triple efecto. En primer lugar, mejora la calidad de los productos que reciben los clientes. En segundo lugar, ayuda a la formalización del sector, garantizando la calidad de los agentes. En tercer lugar, garantiza que la calidad de los productos esté a la altura de los niveles mundiales, lo que permite al sector exportar al extranjero.

Así como con los vehículos de dos ruedas con motor de combustión interna, además del gran mercado nacional de la India, también se espera que el país se convierta en un importante centro de exportación de vehículos eléctricos de dos ruedas.

El creciente interés de los consumidores por los vehículos eléctricos de dos ruedas en la India y en todo el mundo emergente sigue estando impulsado por el atractivo coste total de funcionamiento y la propuesta tecnológica que ofrecen los VE. Esto es aún más relevante con el aumento de los precios del combustible.

Creemos que el sector de los vehículos eléctricos crecerá rápidamente a medida que el interés de los consumidores se refuerce con un apoyo político activo. Los vehículos eléctricos de dos ruedas no sólo proporcionarán movilidad a bajo coste a millones de personas en los mercados emergentes, sino que también serán una pieza importante del rompecabezas de las ciudades limpias, el transporte neto cero y la seguridad energética.

Daniel Randon, Presidente de Randoncorp

El aspecto más desafiante para acelerar la descarbonización del transporte por carretera en los mercados emergentes es la falta de un entendimiento común sobre las realidades locales, lo que lleva a dos sugerencias fundamentales:

Esto beneficiaría no sólo a la cadena industrial, sino también a otras cadenas como las empresas de infraestructuras y servicios asociados. Nuestra experiencia en Brasil nos demuestra que este es el camino más adecuado.

Esto se da no sólo por el potencial de Brasil para liderar la economía verde, sino también por el nivel de adaptabilidad que podemos alcanzar, dada la multiplicidad de características que tenemos dentro del mismo país y la burocracia a la que aún nos enfrentamos.

Los vehículos equipados con motores flex-fuel -que pueden funcionar tanto con gasolina como con etanol- tienen una fuerte presencia en Brasil, por ejemplo. El potencial de desarrollo de los biocarburantes también ha crecido.

Otro ejemplo es el sistema de eje auxiliar eléctrico que hemos desarrollado en Randoncorp, junto con socios y start-ups, que puede reducir hasta un 25% el consumo de combustible fósil de los camiones. Esta solución también tiene potencial para utilizarse en otros vehículos pesados, como autobuses o tractores.

Este mecanismo podría tener una gran aplicación en Sudamérica y África, o incluso en países de Asia Central, debido a las condiciones de relieve muy diferentes y a las deficientes condiciones de las infraestructuras, que pueden permitir un uso más intensivo del eje auxiliar, reduciendo así otros consumos perjudiciales para la naturaleza.

Esta es solo una de las tecnologías que hemos creado. También hemos invertido mucho en el diseño de piezas de automoción con materiales más ligeros, como los compuestos, y con la aplicación de niobio a escala nanométrica, una tecnología con patente exclusiva que mejora las propiedades de innumerables materiales, desde pinturas hasta piezas de fundición, entre otros.

Dave Coffey, CEO de la Asociación Africana de Fabricantes Automotrices (AAAM)

El sector automovilístico africano está bien preparado para la industrialización y el crecimiento. 2023 será un año de cambios radicales para la industria automovilística africana, con cinco países clave -Ghana, Costa de Marfil, Nigeria, Egipto y Kenia- que aplicarán políticas automovilísticas progresistas o que están a punto de aprobarlas y aplicarlas.

Otros países africanos están explorando su ventaja competitiva. Hasta ahora, sólo Marruecos y Sudáfrica han industrializado con éxito y de forma competitiva sus industrias automovilísticas, con volúmenes de producción en torno al millón de vehículos.

Se entiende que no todos los países pueden ensamblar un vehículo -los países centrales ensamblarán vehículos con economías vecinas que compartirán la cadena de valor en función de su ventaja competitiva y sostenible- y se está trabajando mucho sobre el terreno para explorar y desarrollar cadenas de valor con una colaboración regional clave para impulsar la escala.

La importación anual de entre 3 y 5 millones de autos usados en África es un entorno no regulado en el que muchos no son aptos para circular y tienen normas de emisiones obsoletas. Un ecosistema de vehículos usados es clave para una movilidad asequible, pero la fuente hará la transición a vehículos ensamblados en África que cumplan unas normas mínimas.

La transición a los vehículos de nueva energía dependerá de la asequibilidad y variará en función de los segmentos de movilidad, con los vehículos de dos y tres ruedas marcando el ritmo junto con el transporte público en las grandes ciudades.

Regular el estado de los vehículos usados importados en África también desempeñará un papel importante en la reducción inicial de las emisiones de carbono. La industrialización efectiva y el crecimiento del sector automovilístico, al tiempo que se proporciona una movilidad asequible, constituyen una enorme oportunidad de empleo para el continente.

La AAAM, la Secretaría de la Zona de Libre Comercio Continental Africana (AfCFTA), la Comisión de la Unión Africana, la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África, Afreximbank y la Organización Africana de Normalización han desarrollado una estrategia automovilística para el continente que fue adoptada como documento vivo por el Consejo de Ministros de los países africanos en Botsuana en febrero de 2023.

Esta estrategia incluye la formación de un Grupo de Trabajo Automotriz AfCFTA para ponerla en práctica. Nunca antes se había visto en África tal alineación; los actores adecuados están en la sala con el creciente apoyo de los gobiernos africanos.