4 formas en que un incumplimiento de pago de la deuda en EE. UU. podría afectar tu bolsillo

Estados Unidos está a punto de incurrir en el incumplimiento de pago de su deuda, un hecho sin precedentes que, según los expertos, podría tener consecuencias devastadoras para la economía mundial.

La crisis de la deuda se debe a la incapacidad de los legisladores estadounidenses para elevar el techo de la deuda. El techo, también conocido como el límite de la deuda, implica la cantidad de dinero que el gobierno de EE. UU. puede pedir prestado para pagar sus facturas, que incluyen compromisos legales para financiar todo, desde los salarios militares a las prestaciones sanitarias.

Durante décadas, elevar el techo de la deuda ha sido algo rutinario, ya que el gobierno de EE. UU. tiene un déficit presupuestario y funciona en gran medida tomando dinero prestado. Sin embargo, la polarización partidaria ha impedido elevarlo en las últimas semanas, desatando una preocupación generalizada por las consecuencias económicas. Además, dado que el dólar estadounidense es la moneda de reserva mundial, una quiebra de la deuda estadounidense tendría importantes consecuencias internacionales.

"No se pueden exagerar las consecuencias de un default de la deuda estadounidense", declaró Matthew Blake, responsable de Sistemas Financieros y Monetarios del Foro Económico Mundial. "Los responsables políticos deben tomar todas las medidas necesarias para evitar maniobras arriesgadas a la hora de gestionar las finanzas del país".

En una reciente carta a los líderes del Congreso, la Secretaria del Tesoro, Janet Yellen, declaró que un incumplimiento de pago de la deuda "causaría graves dificultades a las familias estadounidenses, perjudicaría nuestra posición de liderazgo mundial y plantearía dudas sobre nuestra capacidad para defender nuestros intereses de seguridad nacional".

¿Cómo podría afectar a los consumidores un default de la deuda estadounidense? He aquí cuatro consecuencias a tener en cuenta:

Se espera que un default de la deuda estadounidense -incluso una breve ruptura del techo de deuda- empuje a la economía estadounidense a una recesión.

Según un análisis de Moody's, un incumplimiento de pago prolongado provocaría un descenso del PIB real hasta finales de 2023, con una caída estimada del 4,6%. Las perspectivas de crecimiento a largo plazo también disminuirían. "La recesión económica que se produciría sería comparable a la sufrida durante la crisis financiera mundial", afirma el gigante de la calificación crediticia en su informe.

Mientras tanto, un análisis publicado por el Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca concluye que un incumplimiento de pago prolongado podría provocar una contracción de la economía superior al 6% este mismo año.

Los economistas señalan que la posibilidad de recesión podría ser especialmente perjudicial, ya que el gobierno sería incapaz de proporcionar alivio financiero al público. Como señala el informe de la Casa Blanca, el "gobierno sería incapaz de promulgar medidas anticíclicas en una recesión inducida por el incumplimiento" y "habría opciones políticas limitadas para ayudar a amortiguar el impacto en los hogares y las empresas".

Una recesión económica en Estados Unidos también afectaría negativamente al comercio mundial, presionando a las economías de todo el mundo.

Se prevé que las acciones estadounidenses caigan drásticamente como consecuencia de un incumplimiento de pago de la deuda. El informe de la Casa Blanca estima que un default prolongado podría hacer que el mercado bursátil se desplomara un 45%.

La caída afectaría significativamente a los fondos de jubilación y a la confianza de los consumidores, agravando aún más la desaceleración económica, advierten los expertos. Según Moody's, una venta masiva de acciones podría acabar con 10 billones de dólares de la riqueza de los hogares estadounidenses.

Se espera que las bolsas internacionales también se resientan. Las bolsas europeas ya han bajado como consecuencia del estancamiento en Washington.

Como consecuencia de la recesión económica, se prevé que el desempleo aumente significativa y rápidamente.

Moody's calculó que un default prolongado podría acabar con casi 8 millones de puestos de trabajo y aumentar la tasa de desempleo por encima del 8%. Incluso un breve incumplimiento del techo de la deuda podría costar 1,5 millones de puestos de trabajo y aumentar el desempleo hasta el 5%, según la agencia.

"Un incumplimiento de pago prolongado probablemente causaría graves daños a la economía", añade el informe de la Casa Blanca, advirtiendo que el empleo podría pasar de su actual ritmo de crecimiento a la pérdida de millones de puestos de trabajo.

Un default de la deuda encarecería el endeudamiento de Estados Unidos, ya que el riesgo de mantener deuda del Tesoro aumentaría para los prestamistas. Esto provocaría una subida de los tipos de interés en toda la economía estadounidense.

En abril, Fitch Rating declaró que un incumplimiento de pago de la deuda estadounidense supondría el paso de la calificación del país a una clasificación "RD" (Restricted Default) y que los títulos del Tesoro estadounidense afectados llevarían una calificación "D" hasta que se corrigiera el incumplimiento.

"Los riesgos generados por el default harían que los tipos de interés se disparasen, incluidos los de los instrumentos financieros que utilizan los hogares y las empresas: bonos del Tesoro, hipotecas y tipos de interés de las tarjetas de crédito", afirma el informe de la Casa Blanca.

Por su parte, la empresa estadounidense de tecnología inmobiliaria Zillow calcula que un incumplimiento provocaría una subida de los tipos de interés de las hipotecas a 30 años hasta el 8,4% en los próximos meses y una caída de las ventas de viviendas del 23% durante la recesión.