El Bitcoin sigue disparado: ya es más valioso que una onza de oro

Por primera vez en la historia, el valor del Bitcoin ha superado al de una onza de oro. Aunque esto apunta a ser algo temporal, es un dato que refleja a la perfección la subida que está teniendo en los últimos tiempos el valor de la criptomoneda. Tal y como cuentan en CoinDesk, esto ha sido posible gracias a que coincidan una importante bajada (de la que ya se está recuperando) en el valor del oro y una subida en el del Bitcoin.

En el preciso momento en el que estamos escribiendo este artículo, el Bitcoin vale exactamente 1.279,23 dólares según el CoinDesk Bitcoin Price Index, mientras que el oro está situado en 1.228,57 según Bloomberg Markets. El dato marca un nuevo hito en la historia del Bitcoin, que empezó el año pasando de los 1.000 dólares y no ha dejado de subir desde entonces.

Siguiendo la tendencia del oro, lo lógico es que después de la caída de esta madrugada su valor vuelva a subir otra vez. Pero tampoco podemos descartar que el dato obtenido por el Bitcoin anime aún más a quienes invierten en él y su valor siga su racha ascendente normalizando el que esté por encima del oro, aunque queda por ver hasta dónde puede llegar este crecimiento y cuándo empezará a bajar otra vez.

Tal y como os contamos a principios de año, el pasado noviembre su valor era de unos 730 dólares, y a pesar de sufrir algunas caídas, su valor desde entonces no ha dejado de dispararse. Los factores que ya os contamos que podrían estar influyendo en esta subida son por una parte su enorme impacto en China, donde las autoridades están considerando distintas políticas regulatorias, pero también la desmonetización global e incluso la incertidumbre que genera la Administración Trump.

Si las cosas siguen así, este año es inevitable que escuchemos hablar mucho sobre el Bitcoin desde las administraciones públicas. Sin ir más lejos, hace dos meses supimos que la Unión Europea quiere regular el Bitcoin e incluso acabar con su anonimato, mientras que en países como Japón el año pasado expresaron su intención de permitir incluso pagar facturas con esta moneda.

Por lo tanto, aquí tenemos expresadas las dos corrientes de opinión más comunes frente al Bitcoin. Por una parte están los que se preocupan del hecho de que sea una moneda privada, y que por lo tanto sea más difícil investigar su procedencia y qué se ha hecho con ella. Y por otro lado están quienes asumen ya que es cosa del presente, y se preparan para una ciudadanía que lo utilice cada vez más.