4 acciones para echar a andar el Nuevo Modelo Educativo

Imagina que tienes frente a ti por primera vez una pantalla con unas letras de colores y una caja de texto. Seguramente no sabrías para qué sirve ni cómo usarla. Quizá algo de intuición te lleve a interactuar con dicha caja a través de una frase o una palabra sin saber que estás a punto de abrir la caja de Pandora: navegar en la red. A partir de entonces surge un mundo de posibilidades por descubrir.

Así se creó el concepto de ‘navegar en la web’, con el propósito de interactuar y descubrir contenidos de forma autónoma. Tejer redes de información a partir de miles de alternativas de conocimiento; seleccionar de manera libre y dinámica el contenido de interés; explorar e ir más allá.

Cuando conocí la propuesta del Nuevo Modelo Educativo que se presentó en días pasados y su principal premisa –”aprender a aprender”­– supe de lo que se estaba hablando y lo relacioné inmediatamente con la flexibilidad y dinamismo que hoy nos ofrece la tecnología. No pude evitar pensar en el modelo educativo implementado en Holanda desde 2013: el modelo de la nueva era. Éste propone un aprendizaje autónomo donde el estudiante es quien establece sus propias metas guiado por el maestro; está basado en premisas propuestas por Steve Jobs.

La tecnología nos ofrece posibilidades de aprendizaje, no hay un solo método o un solo camino, eso depende de cada persona, de sus capacidades e intereses. Sin embargo, tampoco se pueden dejar de lado las habilidades digitales que se tienen que cultivar en los estudiantes para generar competencias de análisis e interpretación de información para que realmente se traduzca en aprendizaje significativo.

Esto me hizo reflexionar que la tecnología aplicada a la educación es un reto que no se resuelve con la compra de software o la creación de unos cuantos contenidos digitales, se trata de la creación de un ecosistema digital educativo: alumnos, padres, docentes, gobierno e iniciativa privada.

En el año 2010, se creó en Noruega el Centro Noruego para las TIC en la Enseñanza cuyo objetivo consiste en la ampliación nacional de la aplicación de las competencias digitales en todos los niveles de enseñanza. Incluye la participación de docentes, gobierno, instituciones públicas y privadas para crear un sistema que involucre realmente a toda la comunidad.

Para ello se debe trabajar de manera importante en los siguientes puntos, que bajo mi experiencia en la implementación de tecnología educativa en diversas organizaciones, han sido claves para el éxito de esta:

1. Seleccionar la herramienta correcta. La clave para que la tecnología se emplee con éxito es identificar qué solución digital es la apropiada para cada caso. Una tableta puede servir para tomar fotografías como respuesta a un cuestionario o tomar un curso interactivo, pero otras situaciones, como evaluaciones, pueden requerir una computadora de escritorio, o un pizarrón que fomente la participación colectiva. Para cada caso se pueden emplear recursos gráficos interactivos basados en tecnología.

2. Estilos de aprendizaje. Conocer las necesidades de aprendizaje es fundamental para el diseño de contenido. Esto varía de acuerdo a la edad y nivel educativo, incluso de los intereses y habilidades colectivas. El estilo de aprendizaje de un grupo determinado de alumnos puede ser más visual y para ello se tienen que emplear recursos particulares y el docente debe ser capaz de identificar dichos estilos.

3. Capacitación. Todo el ecosistema involucrado en un nuevo modelo educativo debe de estar capacitado de acuerdo a su rol. La clave está en dotar de herramientas que apoyen la labor tanto de padres como de docentes, estudiantes y del propio gobierno.

4. Creación de contenido. El contenido es la columna vertebral del aprendizaje. Considerando los estilos de aprendizaje, la renovación curricular y los diversos formatos que existen, los contenidos deben ser relevantes y dinámicos para realmente apoyar el aprendizaje.

Es necesario estimular la inversión de empresas públicas y privadas en nuevas herramientas que contribuyan al impulso de la educación. Somos corresponsables en crear un mejor futuro y todos de alguna forma participamos en este ecosistema digital. Las empresas que conformamos el sector de las TI conocemos de primera mano el alcance de la tecnología, el siguiente paso es ponerla a disposición de las siguientes generaciones para que puedan aprender a aprender.