Cinco años para los ODS: ¿Estamos en camino de cumplirlos?

Las Naciones Unidas hacen un seguimiento anual del progreso en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Image: Unsplash/John Cameron
- Solo el 18% de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) van por buen camino, casi la mitad avanzan muy lentamente y cerca de una quinta parte retroceden.
- A pesar de los avances en materia de salud, educación, energía y acceso digital, persisten retos importantes en materia de pobreza, igualdad de género, seguridad alimentaria y resultados sanitarios.
- En un momento de retraso en muchos de los objetivos para 2030, las Reuniones de Impacto sobre Desarrollo Sostenible del Foro Económico Mundial convocarán a los líderes mundiales para acelerar el progreso.
El año 2015 marcó un punto de inflexión en la cooperación mundial: no solo se adoptó el Acuerdo de París sobre el cambio climático, sino que las Naciones Unidas (ONU) también acordaron su Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 sirven como referente clave para que los Estados miembros de la ONU impulsen mejoras en "las personas, el planeta y la prosperidad". La erradicación de la pobreza, considerada indispensable para el desarrollo sostenible, se destacó como objetivo prioritario para alcanzar la prosperidad.
A menos de cinco años para que termine la década, ¿cómo estamos avanzando en relación con esos 17 objetivos?

Progreso, pero no lo suficientemente rápido
La ONU revisa anualmente el progreso en los ODS. El informe de este año refleja tanto esperanza como preocupación.
Según el informe, aunque los avances en materia de salud, educación, energía y acceso digital han mejorado la vida de millones de personas, el cambio aún no es lo suficientemente rápido como para alcanzar plenamente los ODS en 2030. Solo el 18% de los ODS están en camino de cumplirse, y otro 17% muestra un progreso moderado. Casi la mitad avanza con demasiada lentitud, y cerca de una quinta parte incluso está retrocediendo en un entorno volátil, marcado por conflictos, cambio climático, tensiones geopolíticas y fluctuaciones económicas.
A continuación se presentan algunas de las principales conclusiones, basadas en datos relativos a 2023 y 2024.
La brecha en materia de pobreza y desigualdad sigue siendo considerable (ODS 1, 5 y 10)
Desde 2015, alrededor del 60% de los países encuestados por las Naciones Unidas han logrado aumentar los ingresos y el consumo del 40% más pobre de su población.
Sin embargo, el 6,9%, es decir, 800 millones de personas, siguen viviendo en condiciones de pobreza extrema. Esto supone solo 1,5 puntos porcentuales menos que en 2015 (8,4%) y se prevé que la tasa se mantenga prácticamente estancada durante los próximos cinco años.
La ONU afirma que es poco probable que se erradique la pobreza extrema como consecuencia de la lenta recuperación de la COVID-19, la volatilidad económica, las crisis climáticas y el lento crecimiento en regiones como el África subsahariana, donde vive la mayoría de los pobres del mundo.
Sin embargo, en 2023 más de la mitad de la población mundial tenía acceso a protección social, lo que supone un notable aumento con respecto al 42,8% de 2015.
Se mantuvo el impulso en materia de legislación sobre igualdad de género, y la proporción de mujeres en los parlamentos nacionales aumentó en 4,9 puntos porcentuales entre 2015 y 2024. Asimismo, la ONU señala un aumento de 2,4 puntos porcentuales en el número de mujeres que alcanzan puestos directivos.
Sin embargo, el progreso hacia la igualdad de género sigue siendo lento. Las mujeres continúan estando subrepresentadas en puestos de liderazgo y en la toma de decisiones, y tienen un acceso limitado a la educación, las carreras profesionales y la autonomía. Esto coincide con el Informe Global sobre la Brecha de Género 2025 del Foro Económico Mundial, que concluyó que se necesitarían otros 123 años más para alcanzar la plena paridad a nivel mundial.

El hambre afecta a la salud de las mujeres y los niños (ODS 2 y 12)
Casi una de cada once personas pasó hambre en 2023, y más de dos mil millones sufrieron inseguridad alimentaria entre moderada y grave. Esto a pesar de que las inversiones agrícolas mundiales alcanzaron un nuevo récord de más de 700 000 millones de dólares en 2023.
Aunque los precios mundiales de los alimentos han bajado, siguen siendo tres veces más altos que antes de la pandemia de COVID-19. La mitad de los países encuestados informaron de precios de los alimentos moderadamente altos o excepcionalmente altos, lo que supone una caída de 10 puntos porcentuales desde 2022.
Si bien se redujo en 3,2 puntos porcentuales el retraso en el crecimiento de los niños menores de cinco años debido a la malnutrición, solo el 34% de los bebés de entre 6 y 23 meses cumplían los estándares mínimos de diversidad alimentaria.
Del mismo modo, solo el 65% de las mujeres de entre 15 y 49 años a nivel mundial cumplían los estándares mínimos de diversidad alimentaria.
La esperanza de vida saludable y la mortalidad infantil se desvían de su curso (ODS 3)
La esperanza de vida saludable mejoró en cinco años entre 2000 y 2019. Sin embargo, parte de este progreso se revirtió durante la pandemia, lo que redujo la esperanza de vida en 1,8 años.
La tasa mundial de mortalidad materna se redujo de 228 muertes por cada 100 000 nacidos vivos en 2015 a 197 en 2023. Sin embargo, más de 250 000 mujeres siguen muriendo durante el embarazo y el parto.
La mortalidad entre los niños menores de cinco años se redujo en un 16% entre 2015 y 2023. Sin embargo, esto aún supuso la muerte de 4,8 millones de niños en 2023. Según las tendencias actuales, se prevé que las muertes aumenten hasta los 30 millones en 2030.
Los programas de inmunización infantil aún no se han recuperado de los reveses sufridos durante la pandemia, y los niveles de servicio aún no se han restablecido por completo.
La prevención de la malaria ha salvado 12,7 millones de vidas desde 2000, las infecciones por VIH se han reducido en un 40% desde 2010 y los casos de tuberculosis se han estabilizado.

La brecha digital frena el progreso en educación y empleo (ODS 4, 8 y 9)
Entre 2015 y 2024, 110 millones de niños más se han matriculado en la escuela, y las tasas globales de escolarización han aumentado significativamente, pasando del 84,7% al 88,1% de finalización en la enseñanza primaria y del 53,2% al 59,6% en la enseñanza secundaria superior en 2024.
Sin embargo, la ONU considera que el progreso se ha ralentizado: el número de niños sin escolarizar ha aumentado un 3% desde 2015.
Los países de bajos ingresos son los más afectados, ya que el 36% de los jóvenes en edad escolar de estos países no están escolarizados, frente a solo el 3% en los países de altos ingresos. Más de la mitad de los niños sin escolarizar viven en el África subsahariana.

Estas trayectorias continúan en el empleo. A pesar de que el desempleo mundial alcanzó un mínimo histórico de solo 5% el año pasado, más de la mitad de los trabajadores del mundo ocupaban puestos informales. Las mujeres eran las más afectadas, con más de 9 de cada 10 mujeres en los países menos desarrollados ocupando puestos informales. Es probable que esta situación se vea afectada por la desaceleración del PIB mundial per cápita hasta el 1,5% este año, en comparación con el 2% entre 2010 y 2014.
Las habilidades en materia de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son esenciales para el crecimiento económico y social. El uso de Internet a nivel mundial mejoró del 40% en 2015 al 68% en 2024. Sin embargo, en los países en desarrollo sin acceso al mar y en los países menos adelantados, se sitúa en el 39% y el 35%, respectivamente. También se observó una brecha del 5% entre mujeres y hombres, de manera que casi 190 millones más de hombres que de mujeres estaban conectados.
Los avances en materia de agua y energía se ven amenazados por el cambio climático (ODS 6, 7, 11, 13, 14 y 15).
Desde 2015, el acceso al agua potable ha aumentado del 68% al 74%, el saneamiento ha mejorado en 10 puntos hasta alcanzar el 58% y los servicios básicos de higiene han pasado del 66% al 80%. Sin embargo, el 10% de la población mundial sigue enfrentándose a un estrés hídrico elevado o crítico.
La electrificación aumentó del 84% en 2015 al 91,7% en 2023, lo que supone un avance significativo hacia el ODS 7. Cuarenta y cinco países lograron el acceso universal, pero se observaron pocos cambios en la población conectada del África subsahariana, a pesar de que la cobertura aumentó del 33% al 53%.

La energía renovable es la fuente de energía de más rápido crecimiento hoy y se prevé que supere al carbón como fuente principal de electricidad en 2025.
Esta transición es urgente, ya que en los últimos años se han batido récords de temperatura, continuando una alarmante tendencia al alza. Las temperaturas superaron el objetivo de 1,5 °C del Acuerdo de París. Los niveles de CO2 alcanzaron su máximo y, a raíz de ello, se intensificaron efectos como el blanqueamiento de los corales, el deshielo de los glaciares y los incendios forestales.
Sin embargo, con riesgos como los fenómenos meteorológicos extremos, la pérdida de biodiversidad y los cambios en los sistemas terrestres entre las principales preocupaciones del Informe sobre Riesgos Globales 2025 del Foro, los países han aumentado su preparación ante los desastres naturales. La mortalidad por este tipo de eventos se ha reducido a la mitad entre 2015 y 2023.
¿Qué está haciendo el Foro Económico Mundial en relación con el cambio climático?
Financiar los ODS sigue siendo un reto (ODS 17)
El último informe de la ONU revela que sigue existiendo un gran déficit de financiación para alcanzar los ODS en el plazo fijado para 2030.
Los países en desarrollo necesitan cubrir un déficit de financiación de los ODS de 4 billones de dólares anuales, al tiempo que se enfrentan a una carga de servicio de la deuda de 1,4 billones de dólares. Además, la ayuda al desarrollo disminuyó un 7,1 % el año pasado, y se esperan nuevos recortes en 2025.
Será esencial contar con financiación para llevar a cabo las transiciones necesarias que permitan avanzar de forma significativa hacia los ODS, junto con compromisos continuos con la acción internacional y local, ya sea para erradicar la pobreza, alimentar al mundo, mejorar la salud mundial y la igualdad de género o cerrar la brecha digital.
Impulsar el progreso de los ODS es uno de los objetivos principales de las Reuniones de Impacto sobre el Desarrollo Sostenible del Foro Económico Mundial. Estas reuniones, que se celebrarán en Nueva York del 22 al 26 de septiembre de 2025, reunirán a líderes empresariales, responsables políticos, emprendedores sociales y organizaciones internacionales de la sociedad civil para compartir ideas y ejemplos de medidas eficaces que aceleren nuestro avance hacia 2030.
No te pierdas ninguna actualización sobre este tema
Crea una cuenta gratuita y accede a tu colección personalizada de contenidos con nuestras últimas publicaciones y análisis.
Licencia y republicación
Los artículos del Foro Económico Mundial pueden volver a publicarse de acuerdo con la Licencia Pública Internacional Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0, y de acuerdo con nuestras condiciones de uso.
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no del Foro Económico Mundial.
Mantente al día:
Desarrollo sostenible
La Agenda Semanal
Una actualización semanal de los temas más importantes de la agenda global
Más sobre Desarrollo SostenibleVer todo
Abraham Baffoe
2 de diciembre de 2025









