Premio Crystal 2025: Conoce a los tres ganadores de este año

En Davos 2025, celebramos el impacto positivo extraordinario de líderes culturales excepcionales que están transformando la sociedad. Los ganadores del Premio Crystal 2025 son más que visionarios: son catalizadores de cambios importantes.

A través de su creatividad y perspectiva, nos unen, amplían nuestra comprensión de la experiencia humana y ofrecen visiones audaces y transformadoras que desafían el pensamiento inmediatista y los puntos de vista cerrados. Su trabajo fomenta conexiones sólidas, suscita una reflexión profunda e impulsa la creación de un futuro más inclusivo y progresista para forjar una sociedad mejor.

Los tres galardonados con el 31º Premio Anual Crystal son: David Beckham, Embajador de Buena Voluntad de UNICEF y defensor mundial de los derechos de los niños y las niñas; Diane von Fürstenberg, renombrada diseñadora de moda, filántropa y defensora de los derechos de la mujer; y Riken Yamamoto, reputado arquitecto, activista social y galardonado con el Premio Pritzker 2024.

"En mis 20 años como Embajador de Buena Voluntad de UNICEF, he tenido el privilegio de constatar el extraordinario compromiso de los embajadores, del personal y de los amigos de la organización en su misión de proteger y elevar a los niños y niñas en todo el mundo. Al aceptar este premio, pienso en los muchos individuos que trabajan incansablemente en circunstancias difíciles para mejorar las vidas de los niños y niñas en todo el mundo."

David Beckham recibe el Premio Crystal 2025 en reconocimiento a su larga labor humanitaria y su inquebrantable compromiso con la mejora de la vida de los niños y las niñas de todo el mundo. Por su incesante dedicación a la educación, la protección y el bienestar de los niños y niñas, Beckham se ha convertido en un fuerte líder global en la defensa de los derechos de los niños y niñas en situación de vulnerabilidad en todo el mundo, utilizando su plataforma y sus recursos para crear un cambio positivo duradero.

Al celebrar este año dos décadas como Embajador de Buena Voluntad de UNICEF, David ha recorrido numerosos países, incluidas las zonas afectadas por crisis, donde ha llamado la atención sobre las necesidades de los niños y niñas que, con demasiada frecuencia, se encuentran en primera línea de conflictos y crisis. Su trabajo va más allá de la respuesta a las emergencias; es un firme defensor de las jóvenes y adolescentes, apoyando programas específicos que invierten en salud, educación, derechos e igualdad de género. A través de su trabajo con UNICEF, ha sensibilizado sobre la importancia de las vacunas y desde hace tiempo lucha por la prevención de la malaria.

En 2009, David fue uno de los fundadores de la organización benéfica Malaria No More y, desde entonces, es su embajador en el Reino Unido. En 2018, encabezó la galardonada campaña Malaria Must Die (La malaria debe morir), que llegó a mil millones de personas con ocasión de la Reunión de Jefes de Gobierno de la Commonwealth, instando a una acción audaz para lograr un mundo libre de malaria.

Su convicción en el poder transformador del deporte como fuerza positiva ha sido decisiva para que apoyara diversos programas dirigidos a los jóvenes e impulsara iniciativas de base que abordan cuestiones como el racismo, la salud mental y la igualdad de oportunidades. Su compromiso personal con el apoyo a los jóvenes talentos del fútbol le llevó a contribuir al desarrollo de un sistema de academias para garantizar el acceso y la inclusión en el fútbol estadounidense.

El legado de Beckham como deportista de renombre mundial y como embajador comprometido con los derechos de la infancia ejemplifica su profundo impacto cultural y su influencia para impulsar el cambio social. Su dedicación permanente a mejorar vidas en todo el mundo demuestra el poder de su plataforma para ejercer influencia y crear un impacto positivo para todos, con alcance y resultados positivos a escala global.

"Me transformé en una mujer empoderada gracias a un simple vestidito que encarnaba la confianza. Como era un vestido, pude compartir esa confianza con muchas mujeres... y ese fue el comienzo de mi misión de empoderar a las mujeres."

Diane von Furstenberg, renombrada diseñadora de moda, filántropa y escritora, recibe el Premio Crystal 2025 por su contribución excepcional al empoderamiento de las mujeres a través de la filantropía, la mentoría y la responsabilidad social. Como fundadora de su marca homónima y creadora del icónico vestido cruzado, siempre ha defendido la independencia y la fuerza de las mujeres, convirtiéndose en una voz destacada en el movimiento por la igualdad de género y los derechos de la mujer.

Más allá de sus contribuciones a la moda, Diane es una apasionada defensora de las mujeres. En 2010, junto con la fundación Diller-von Furstenberg Family Foundation, creó los DVF Awards para reconocer, apoyar y amplificar las voces de mujeres extraordinarias que se dedican a transformar la vida de otras mujeres. Cada año, se otorga a cinco galardonadas una beca para impulsar su importante labor.

Diane también es miembro del consejo de Vital Voices Global Partnership, una organización sin ánimo de lucro fundada en 1997. Sus miembros, una poderosa red global de mujeres líderes, engloban a más de 20 000 agentes del cambio de 185 países, que se animan a imaginar un futuro más equitativo para todos. También forma parte de la junta del Council of Fashion Designers of America (CFDA), del que fue presidenta durante trece años.

Su labor filantrópica le ha granjeado numerosos reconocimientos, como el premio CFDA Lifetime Achievement Award y su ingreso en el National Women's Hall of Fame. Recibió el Chevalier de la Légion D'Honneur de Francia en 2020, así como el Commandeur de l'Ordre de la Couronne de Bélgica, su país natal, en 2021. Además de sus esfuerzos por empoderar a las mujeres, también encabezó la recaudación de fondos y la creación del nuevo Museo de la Estatua de la Libertad en Liberty Island, Nueva York.

"La arquitectura es creada por la gente de una comunidad, y es esencial para la continuidad de esa comunidad. La responsabilidad de un arquitecto es crear una arquitectura hermosa junto con la gente de la comunidad. La arquitectura tiene el poder de llevar las memorias más preciadas de la comunidad al futuro. Mi mayor alegría sería crear esa arquitectura. Es un honor para mí recibir el Premio Crystal".

Riken Yamamoto es galardonado con el Premio Crystal 2025 por su excepcional contribución a la arquitectura y la sociedad. Su dedicación a la regeneración de las comunidades, su trabajo pionero en sostenibilidad y su filosofía reflexiva del diseño han tenido un impacto significativo. El trabajo de Yamamoto influye en el futuro de la práctica arquitectónica, destacando su papel vital en mejorar la vida humana y preservar el medio ambiente.

Nacido en 1945 en Pekín, Yamamoto es un arquitecto y educador visionario, cuyo trabajo ha influido tanto en el entorno construido como en el pensamiento arquitectónico. Fue profesor en la Universidad Nacional de Yokohama, presidente de la Universidad Zokei de Nagoya, profesor visitante en la Universidad de las Artes de Tokio y, en la actualidad, es profesor visitante en la Universidad de Kanagawa. Por sus contribuciones, Yamamoto ha recibido los títulos de Profesor Honorario y Doctor Honorario en Ingeniería de la Universidad Nacional de Yokohama y la Universidad Nihon.

Sus diseños más influyentes, como el proyecto de viviendas Hotakubo, la Universidad Prefectural de Saitama, la zona de Jian Wai SOHO y el Museo de Arte de Yokosuka, reflejan su fe en la arquitectura como catalizador de conexiones humanas y progreso social. Tras el terremoto de Japón Oriental en 2011, fundó el Local Area Republic Lab para apoyar la regeneración de las comunidades, reforzando su compromiso con la arquitectura como espacio de curación.

Los méritos de Yamamoto fueron reconocidos con el Premio de la Academia de Arte de Japón en 2001, y en 2024 recibió el Premio Pritzker de Arquitectura. El jurado del Pritzker elogió su trabajo como una "contribución a la humanidad", mientras que Tom Pritzker, Presidente de la Fundación Hyatt, lo describió como un "filósofo de talla mundial", reconociendo la naturaleza profunda y reflexiva de su filosofía arquitectónica.

La influencia global de Yamamoto se extiende por Japón, China y Europa, combinando modernismo y sensibilidad cultural. Pionero del diseño sostenible, su obra prioriza la armonía ambiental, la eficiencia energética y el uso de materiales naturales.

El legado de Yamamoto es un recordatorio de que la arquitectura no se limita a los edificios, sino que tiene que ver con el impacto duradero que los espacios pueden tener en las personas y las comunidades.