Evaluación de impacto: Cómo desafiar y potenciar la toma de decisiones tradicional

La evaluación del impacto puede ayudar a las empresas a prosperar en un mundo en el que se observa un aumento de la incidencia, frecuencia y gravedad de los problemas sociales y medioambientales. Se trata de una métrica vital en la era del capitalismo de las partes interesadas, que consiste en cuantificar y valorar las externalidades positivas y negativas de una empresa en relación con la sociedad y el medio ambiente. La pregunta más frecuente es si el esfuerzo de valorar el impacto merece la pena. La respuesta es: depende de cómo se utilice.

Las industrias con un potencial de impacto significativo, como la minería, la agricultura o la industria farmacéutica, son cruciales para la agenda mundial de sostenibilidad, en cuestiones como la energía limpia, el hambre cero y la buena salud. Comprender el impacto es esencial para la gestión del riesgo y la creación de valor en este contexto, así como para garantizar una transición justa, construir cadenas de suministro de alimentos resistentes y abordar la desigualdad en la atención sanitaria.

No hay soluciones sencillas. Las empresas se enfrentan a un panorama rápidamente cambiante de riesgos potenciales y, con razón, a un abanico cada vez mayor de partes interesadas que les exigen responsabilidades. Si tomamos la minería como ejemplo, vemos la colisión de retos geopolíticos, una necesidad desesperada de inversión en minerales críticos para la transición ecológica y el deber de hacer lo correcto por las comunidades anfitrionas, entre cuestiones más amplias como el cambio climático y la desigualdad socioeconómica.

La aplicación de la evaluación de impacto a escenarios específicos puede complementar la toma de decisiones tradicional, basada en el valor financiero, al tiempo que sirve como una herramienta útil para el compromiso de las partes interesadas y para garantizar que las empresas mantengan una licencia social para operar. El concepto permite la consideración holística y la medición de temas de sostenibilidad más allá de las emisiones de carbono, desde el uso de los recursos hasta el desarrollo social.

Empresas como Anglo American utilizan la evaluación de impacto para complementar la integración de la sostenibilidad en la estrategia empresarial. Roderick Groenewoud, Director de Estrategia de Sostenibilidad de Anglo American, afirma: "Nuestro propósito es reimaginar la minería para mejorar la vida de las personas. Queríamos articular el valor a través de los ojos de nuestros grupos de interés y tener una idea basada en datos de los factores externos que podrían introducir riesgos en nuestra cuenta de resultados."

Anglo American lleva años desarrollando su enfoque de la valoración del impacto con el apoyo continuo de la organización EY. El trabajo comenzó desarrollando y probando una metodología de valoración a través de una serie de proyectos piloto relacionados con decisiones de inversión clave, que se enfrentan a retos de sostenibilidad. Una de ellas se refería a los impactos asociados a la construcción de una planta desalinizadora para la mina de cobre Los Bronces de Anglo American en Chile. La zona ha sufrido años de sequía, lo que ha afectado a la producción. El análisis demostró que el compromiso de Anglo American de utilizar el agua de la planta no sólo beneficiaría a la empresa, sino que también permitiría liberar agua dulce en la zona de captación más amplia. Otro proyecto piloto analizó la automatización y el equilibrio entre proporcionar empleo a las comunidades locales y garantizar el futuro de las operaciones.

A continuación, se aplicó la evaluación de impacto a una serie de activos para comprender el valor de impacto global de las minas a lo largo de su vida útil, desde la apertura de la mina (impactos históricos) hasta su cierre (impactos previstos). También se han considerado las implicaciones de las medidas de mitigación medioambiental y el desarrollo socioeconómico a largo plazo. Ahora, Anglo American está empezando a trabajar en la integración de la evaluación del impacto en la planificación y la toma de decisiones holísticas.

Como parte de la Value Balancing Alliance, un grupo de empresas multinacionales con el objetivo de normalizar la valoración del impacto, Anglo American también participa en el desarrollo de nuevos enfoques y aplicaciones de esta práctica. En la actualidad, estos resultados no se comunican externamente. El enfoque de la empresa ha estado impulsado por el objetivo de mejorar la toma de decisiones en contraposición a la presentación de informes. Por supuesto, la información y la divulgación son una parte importante del avance del concepto, y la transparencia es vital para cualquier enfoque. Las posibilidades de utilizar la evaluación del impacto para el lavado verde son enormes, y cualquier abuso del concepto podría conducir a una rápida ruptura de la confianza con las partes interesadas.

Otro reto de la evaluación del impacto es que, al igual que ocurría con la contabilidad de los gases de efecto invernadero hace unos años, los enfoques todavía se están alineando y normalizando. Las empresas que tomen la iniciativa, como los miembros de la Value Balancing Alliance, tendrán una ventaja significativa cuando aumente la adopción, ya que practicar la evaluación de impacto es tanto un esfuerzo cultural como logístico. Los expertos en sostenibilidad que comprenden intuitivamente los factores de impacto pueden sentirse incómodos con la evaluación, y los analistas financieros familiarizados con la evaluación pueden carecer de los conocimientos necesarios sobre sostenibilidad para traducir los resultados en acciones. Desde el punto de vista logístico, lleva mucho tiempo localizar los datos necesarios, establecer sistemas de datos sólidos e integrar los datos de sostenibilidad en las actividades de planificación.

Al mismo tiempo, insistir en la perfección no ayuda a lograr el propósito de la evaluación de impacto, que es impulsar decisiones que se alineen con el capitalismo de las partes interesadas, equilibrando las personas, el planeta y los beneficios. Por ello, es pragmático utilizar aproximaciones e hipótesis para complementar los datos que faltan y echar a rodar el balón, siempre que se reconozcan.

Un buen punto de partida sería la primera página de la historia de Anglo American; es decir, aplicar la evaluación de impacto a un problema concreto y ampliar a partir de ahí. Si aún no está seguro de si el esfuerzo merece la pena, pregúntese lo siguiente: ¿Se sentiría cómodo tomando decisiones vitales basadas únicamente en implicaciones financieras, ignorando todas las demás formas de valor, como el tiempo, la salud y la felicidad? ¿Por qué deberían ser diferentes las empresas, dada la considerable magnitud de las implicaciones de sus decisiones?

Las opiniones reflejadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente las de la organización mundial EY ni las de sus empresas miembro.