Desde escuelas forestales hasta reciclaje de aguas grises: estas start-ups están impulsando una revolución verde en América Latina

El impacto de la crisis climática y los problemas de inseguridad alimenticia y eficacia de los recursos son solo algunos de los retos a los que se enfrentan las comunidades de toda América Latina, una región en la que los problemas socioeconómicos se ven agravados por la interrelación con el medio ambiente.

Los enormes recursos naturales de la región -un 25% de los bosques y tierras cultivables del planeta y más del 30% de los recursos hídricos mundiales se encuentran aquí- la hacen especialmente vulnerable a los efectos del cambio climático. Un estudio de la OCDE revela que de los 50 países más afectados por la crisis climática en todo el mundo, 13 se encuentran en América Latina y el Caribe.

La plataforma UpLink del Foro Económico Mundial está trabajando para encontrar y ampliar innovaciones que ayuden a garantizar que el mundo cumpla los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030.

Las siguientes cinco start-ups, todas ellas Innovadores Top de UpLink, están ayudando a abordar estos problemas e impulsar el desarrollo sostenible en toda América Latina de diversas maneras innovadoras.

La agricultura es el mayor consumidor de agua por actividad económica en América Latina y representa el 74% de la extracción total de agua en la región. El impacto del cambio climático, la sequía y el aumento de la población exigen cada vez más un uso eficiente de los recursos hídricos.

La empresa argentina Kilimo utiliza la IA para poner en contacto a agricultores que quieren mejorar sus prácticas de riego con empresas deseosas de cumplir sus propios compromisos de seguridad hídrica. Les permite vender el agua que ahorran a empresas que se comprometen a ser neutrales en el uso del agua. Al compensar a los agricultores por ser eficientes en el uso del agua y proporcionarles herramientas basadas en datos para mejorar su riego, la plataforma ayuda a más de 2000 agricultores de seis países -desde grandes empresas a pequeños microagricultores- y ha ahorrado más de 70 000 millones de litros de agua.

La inseguridad alimentaria se ha convertido en uno de los mayores retos a los que se enfrenta la humanidad. Un informe reciente calcula que más de 258 millones de personas de 58 países se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria.

La start-up tecnológica Nilus ayuda a las personas con bajos ingresos a acceder a alimentos nutritivos y accesibles aprovechando el poder de la compra comunitaria.

La tecnología de la empresa obtiene alimentos y comestibles directamente de agricultores y productores locales y los distribuye a través de redes de compra comunitaria a personas que viven en zonas de desiertos alimentarios, es decir, zonas con acceso limitado a alimentos económicos y nutritivos. Al optimizar y agilizar la cadena de suministro de alimentos, Nilus ofrece productos entre un 70% y un 75% por debajo de los precios de mercado. Actualmente opera en Ciudad de México, Buenos Aires y Lima (Perú).

La minería y la ganadería ilegales son algunos de los muchos problemas que asolan la selva amazónica del sur de Colombia.

Amazonía Emprende es una "escuela forestal" pionera que pretende educar a las comunidades locales, las empresas y los estudiantes sobre las ventajas ecológicas, sociales y económicas de las soluciones basadas en la naturaleza. La iniciativa también ayuda a forjar conexiones entre comunidades y empresas que fomentan las cadenas de valor, ayudan a compensar las huellas de carbono y restauran las tierras degradadas. Al trabajar en colaboración con las comunidades locales del Amazonas, la empresa desempeña un papel vital en el desarrollo sostenible y espera restaurar y conservar hasta 100 000 hectáreas de bosque para 2030.

Las aguas grises procedentes de lavabos, duchas o lavadoras representan una parte importante de las aguas residuales domésticas de todo el mundo. Su reutilización puede tener un gran impacto tanto en la seguridad hídrica como en la eficiencia de los recursos.

Al reutilizar las aguas grises para usos no potables como el riego, el llenado de inodoros y la limpieza, los sistemas compactos de tratamiento de aguas residuales de AQUAKIT transforman las aguas residuales en un recurso valioso que conserva tanto el agua como la energía y los nutrientes.

La tecnología de la empresa boliviana puede adaptarse a grandes residencias y edificios comerciales y es capaz de recuperar hasta 300 000 litros de agua al mes en un solo edificio de 12 plantas.

La economía circular es vital para abordar el problema del plástico de un solo uso. Cada año se producen en el mundo unos 400 millones de toneladas métricas de residuos plásticos, pero menos del 10% del total se recicla.

La start-up chilena Algramo ha creado una solución de envasado inteligente basada en una aplicación que permite a los consumidores pagar por el producto que necesitan, pero no por el envase que lo acompaña. Todo, desde el detergente hasta la comida para perros, puede entregarse y dispensarse en envases reutilizables en casa, lo que garantiza que los consumidores solo pidan lo que van a usar, con el consiguiente ahorro de costes y residuos.

La empresa también se ha asociado con grandes marcas como Unilever y Walmart, y ha puesto a prueba máquinas expendedoras de recambios en Chile y Nueva York (EE.UU.).