TradeTech podría ser el futuro del comercio internacional. Esta es la razón

Estamos en la cúspide de un nuevo amanecer de transformación comercial impulsada por la tecnología.

Tres flujos caracterizan el comercio internacional: el intercambio de productos o servicios, de información y de pago. A lo largo de la historia, las nuevas tecnologías han revolucionado una o varias de estas formas de intercambio, impulsando el crecimiento y la diversificación del comercio. Ejemplos notables son la contenedorización, la tarjeta de crédito y, quizá el más poderoso, Internet.

Hoy, impulsado por una nueva generación de aplicaciones denominadas TradeTech, el sector está listo para avanzar de nuevo. Según una encuesta realizada por el Foro Económico Mundial, el comercio electrónico, los pagos digitales, la computación en la nube, el internet de las cosas (IoT), los servicios digitales, los documentos digitales y el 5G son las tecnologías que tendrán un impacto más inmediato en el comercio. Mientras, la robótica, la realidad virtual, la impresión 3D y la inteligencia artificial (IA) se integrarán a medio plazo.

Hay cuatro áreas que las herramientas TradeTech podrían revolucionar en los próximos años.

Mientras superamos las disrupciones de la era COVID-19, queda claro que las herramientas capaces de predecir y adaptarse en tiempo real pueden ayudarnos a abordar la dinámica del comercio mundial. La IA, por ejemplo, puede anticipar y resolver problemas de la cadena de suministro, facilitar la gestión de riesgos en el despacho de aduanas y sugerir rutas óptimas.

Blockchain puede desplegarse para facilitar la financiación del comercio, en particular para los agentes más pequeños, lo que mejorará la eficiencia en los muelles y desbloqueará el acceso al sistema de comercio mundial. Al mismo tiempo, las aplicaciones IoT pueden ayudar a la gestión de almacenes, mejorar la logística "justo a tiempo" (just in time) y reducir el consumo de energía.

El mundo cada vez más complejo del cumplimiento de las normas comerciales también está maduro para la integración tecnológica. En la actualidad, es necesario un conocimiento profundo de las contrapartes implicadas en una transacción para garantizar que el intercambio no incurre en sanciones o restricciones a la exportación. Mientras tanto, los requisitos ambientales y la normativa sobre diligencia debida en la cadena de suministro, en constante evolución, exigen un profundo conocimiento de las operaciones de los proveedores.

Del mismo modo, la gestión de riesgos exige malabarismos constantes con múltiples opciones de abastecimiento e integrarlas de forma económica.

El sistema comercial mundial necesita simplificación y mucha más transparencia. Una combinación de herramientas de comercio digital y un entorno normativo más claro y sólido mejorará la eficiencia del comercio internacional y apoyará la gestión eficaz de las cadenas de valor mundiales.

El comercio depende de múltiples capas de intercambio de información: entre empresas, entre empresas y clientes, entre empresas y gobiernos, y entre gobiernos de todo el mundo. Una digitalización sencilla, que utilice estándares de datos intercambiables y API (que permiten la comunicación entre dos sistemas informáticos), permitirá que la información fluya entre empresas, autoridades e instituciones financieras de forma segura y a la carta.

En transacciones más complejas, las herramientas analíticas apoyadas en IA ayudarán a la actualización en tiempo real y a la contratación automatizada. También permitirán una orientación, optimización y toma de decisiones mucho más precisas. Recopilar y compartir datos bien estructurados será una condición subyacente para que estas soluciones prosperen.

En los últimos años, hemos sido testigos de importantes inversiones en aplicaciones digitales, como libros contables distribuidos (distributed ledgers, en inglés), activos digitales e IA, que han contribuido a construir la base tecnológica capaz de impulsar una nueva era del comercio mundial. En ninguna parte es esto más evidente que en la financiación del comercio, cuyo acceso limitado constituye un freno para la inclusión comercial.

Según el Banco Asiático de Desarrollo, existe un déficit de financiación del comercio de 2 billones de dólares, que impide a las empresas más pequeñas, especialmente las del mundo en desarrollo, acceder a las oportunidades del comercio mundial. Esto puede superarse con soluciones tecnológicas como blockchain, que puede mejorar los procesos de aprobación, reducir el riesgo de los pagos transfronterizos y reducir el fraude. La posición de liderazgo de los EAU en tecnología financiera (fintech) muestra cómo los mercados interoperables pueden resolver los problemas de identidad digital en la intersección del comercio, la financiación y los pagos.

Ha habido signos alentadores de que la normativa se está poniendo al día con estos avances tecnológicos. La adopción de la ley modelo sobre registros electrónicos transferibles por el Mercado Global de Abu Dhabi (ADGM) en 2021 y por el Reino Unido en 2023 está empezando a superar los obstáculos legales a la plena digitalización de la documentación y los procesos comerciales. La próxima Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio (MC13), que se celebrará en Abu Dhabi en febrero de 2024, brinda la oportunidad de seguir avanzando en materia de políticas, especialmente en lo que respecta al comercio electrónico.

A nivel de negocio-a-negocio (B2B), la iniciativa Digital Standards Initiative, que busca garantizar una digitalización sin fisuras a través del ecosistema comercial, y la Asociación digital de navieras de contenedores (Digital Container Shipping Association, DCSA), lanzada en 2019, también prometen pasos pragmáticos hacia la interoperabilidad necesaria para la plena integración de las herramientas TradeTech. Y los beneficios son tangibles.

La simple digitalización de los conocimientos de embarque (B/L) -documentación de la carga- podría ahorrar 6500 millones de dólares en costes directos en todo el mundo y, gracias a una gestión más rápida de los documentos y a la reducción de los errores humanos, supondría 18 000 millones de dólares en beneficios para el ecosistema comercial y añadiría otros 40 000 millones de dólares al valor del comercio mundial. Da satisfacción observar que varias compañías navieras se han comprometido a utilizar conocimientos de embarque electrónicos para 2030.

Recablear la compleja red del comercio mundial no es tarea fácil. Los intereses creados, los problemas de confianza, las carencias de competencias y la necesidad de alcanzar una escala crítica en la red son obstáculos que hay que superar. Aunque los actores emergentes, más ágiles y menos dependientes de las infraestructuras heredadas, pueden desempeñar un papel catalizador, la interoperabilidad tecnológica y una regulación que incentive la adopción de normas serán fundamentales para desarrollar un ecosistema TradeTech que iguale las condiciones.

En la encuesta Global Trade Risks Report 2023, realizada por el Ministerio de Economía de los EAU a más de 500 líderes empresariales de todo el mundo, el desarrollo, la implantación y la gobernanza de las nuevas tecnologías se identificaron como los mayores retos para el sistema multilateral de comercio. En concreto, el 63% de los encuestados afirmó que "los rápidos avances tecnológicos que requieren adaptación" tendrían un impacto "alto", "muy alto" o "extremadamente alto" en el comercio mundial. Un porcentaje similar sugirió que los flujos de datos transfronterizos y las cuestiones asociadas de privacidad de datos, protección de la propiedad intelectual y seguridad digital se encuentran entre los riesgos más significativos.

En enero del año pasado, el Ministerio de Economía de los EAU y el Departamento de Desarrollo Económico de Abu Dhabi (ADDED) se asociaron con el Foro para lanzar una Iniciativa TradeTech que empezará a abordar muchos de estos problemas. Reúne a innovadores e inversores para acelerar el despliegue de soluciones TradeTech y establecer zonas de pruebas reglamentarias para optimizar su integración en las cadenas de suministro mundiales. El objetivo no es solo hacer que el comercio sea más eficiente, sino también más accesible y transparente.

A medida que nos acercamos a la 13ª Conferencia Ministerial, debemos aprovechar el potencial de las herramientas TradeTech y crear los marcos para su despliegue efectivo. Es un momento crucial que apunta a una nueva y fascinante era comercial con capacidad para generar un enorme valor para todos. Invito a todos a unirse a nosotros en este viaje.