Así es como el liderazgo positivo puede crear un impacto económico sostenible y equitativo

La encuesta "Global Workforce Hopes and Fears" (Esperanzas y Temores de la Fuerza de Trabajo Global) de 2022 de PwC pone de relieve que la "Gran Dimisión" está lejos de terminar. Uno de cada cinco trabajadores planeaba renunciar en 2022, dos tercios de ellos porque intentan encontrar un propósito y un entorno positivo.

A lo largo de 38 años de trabajo en Microsoft, el Vicepresidente Ejecutivo y Presidente de National Transformation Partnerships, Jean-Philippe Courtois ha desarrollado un enfoque de liderazgo denominado "liderazgo positivo", que se basa en la psicología, la neurociencia y años de datos. En esta entrevista, Jean-Philippe expone los detalles de este concepto y el papel de los emprendedores sociales para apoyar su adopción.

Daniel Nowack: Jean-Philippe, usted ha sido un líder en Microsoft durante casi cuatro décadas. Puede hablarnos de algunos de los cambios clave que ha observado en los últimos años?

Jean-Philippe Courtois: Creo que estamos viviendo el cambio más significativo que he visto en mi carrera: La responsabilidad de las empresas está pasando de un enfoque filantrópico de RSC (responsabilidad social corporativa) a la adopción de la ASG (o ESG, acrónimo en inglés para ambiental, social y de gobernanza) como base fundamental de la estrategia empresarial. Este cambio está reconfigurando por completo el mundo empresarial y da vida al capitalismo de las partes interesadas. En la actualidad, más de la mitad del dinero gestionado profesionalmente sigue directrices ASG con el fin de lograr un impacto positivo, además de beneficios. Pero debemos acelerar, dados los retos a los que nos enfrentamos: desde la amenaza existencial del cambio climático hasta el aumento de la desigualdad. Es un imperativo tanto empresarial como moral "construir soluciones rentables a los problemas de la gente y del planeta".

Daniel: Su visión del liderazgo está influida por una firme creencia en la diversidad. Puede decirnos por qué este tema es fundamental para usted?

Jean-Philippe: A medida que el mundo empresarial se reconfigura, también debe hacerlo el liderazgo: tanto en lo que respecta a quiénes consideramos líderes como a la forma en que dirigen. Soy optimista y creo que podemos hacerlo.

Necesitamos urgentemente crear una cantera de talentos más diversa, para que surjan líderes que representen mejor a la población, con una experiencia vivida más amplia. Los datos demuestran que las organizaciones diversas e inclusivas son más innovadoras y, en última instancia, tienen más éxito. Las organizaciones que no se comprometen con objetivos transparentes, oportunidades de carrera y entornos de trabajo inclusivos, en última instancia, no crearán valor holístico.

Daniel: ¿Corresponde a las empresas hacer la mayor parte del trabajo para desarrollar una mano de obra diversa?

Jean-Philippe: Francamente, la mayor parte lo es. Pero en realidad empieza mucho antes. Tenemos que replantearnos las posibilidades de la educación para apoyar una sociedad más orientada a objetivos. Hay que animar y capacitar a los estudiantes para que piensen de forma crítica y se conviertan en personas con conocimientos, pero también con empatía. Debemos construir (y financiar) un sistema educativo más inclusivo, ampliando el acceso a las instituciones de élite, incluidas las escuelas de negocios. Se están haciendo progresos, pero tenemos que ir más rápido y a mayor escala.

Daniel: Hemos asistido a una evolución de los conceptos de liderazgo en los últimos años. Cuál es su visión de la próxima fase del liderazgo en los próximos años?

Jean-Philippe: A través de mi trabajo en Microsoft y de mi fundación familiar, Live for Good, veo que una nueva generación está dando un paso adelante, centrándose en hacer el bien como su "por qué" personal y el propósito de sus organizaciones. Se trata de un nuevo tipo de liderazgo llamado "liderazgo positivo". El liderazgo positivo es una combinación de psicología positiva, neurociencia y atención plena, respaldada por décadas de investigación y datos. También sirve como marco para lograr el éxito de las empresas, las personas y el planeta.

Daniel: ¿Puede hablarnos un poco más del concepto de liderazgo positivo?

Jean-Philippe: El liderazgo positivo tiene sus orígenes en el mundo académico. El profesor Kim Cameron, uno de los cofundadores del Centro de Organizaciones Positivas de la Universidad de Michigan, resume su trabajo en su exitoso libro "Liderazgo Positivo". Sencillamente: las organizaciones con "prácticas virtuosas" y líderes positivos son más productivas, rentables y tienen una moral más alta entre sus empleados.

El trabajo de la Dra. Barbara Fredrikson, profesora del Departamento de Psicología y Neurociencia de la Universidad de Carolina del Norte, donde dirige el Laboratorio de Emociones Positivas y Psicofisiología, ha demostrado durante más de 30 años que las emociones positivas tienen un impacto extraordinario en nuestro bienestar físico y mental y, por tanto, en nuestro impacto positivo en el mundo que nos rodea. Cuando las personas experimentan emociones positivas, sus mentes se amplían y se abren a nuevas posibilidades e ideas. Los entornos positivos nos permiten prosperar y mejorar como individuos y organizaciones.

Mi propio enfoque del liderazgo positivo, que practico desde hace muchos años, parte de tres círculos interconectados: Yo, Yo y los demás, Yo y el mundo. Este modelo parte del individuo, que necesita una mentalidad y unos hábitos positivos, para crear intencionadamente conexiones y experiencias positivas con los demás y hacer el bien en la comunidad y en el mundo en general.

Daniel: En Microsoft, usted también apoya el trabajo de los emprendedores sociales. Qué relevancia tiene su trabajo para el liderazgo positivo?

Jean-Philippe: Una de las tendencias más significativas que observo es el auge de los emprendedores de impacto positivo, o emprendedores sociales en la definición clásica. Estos innovadores buscan impulsar el cambio de los sistemas y el éxito comercial. Son audaces en la escala de sus ambiciones y creativos en los productos y soluciones que desarrollan. Necesitamos esta audacia e innovación si queremos cumplir los ODS de la ONU e impulsar un crecimiento económico más sostenible e integrador. Lo alentador es que los mercados de capitales están respondiendo con inversiones significativas y las industrias establecidas están viendo un enorme valor en la asociación con estos empresarios, para redirigir el negocio para la próxima década y más allá.

Daniel: ¿Necesitamos unos pocos líderes positivos inspiradores o es una mentalidad relevante para todos?

Jean-Philippe: He tenido el privilegio de trabajar, aprender y hablar con muchos líderes positivos, incluso en mi podcast. Ya sean entrenadores deportivos, académicos o directores ejecutivos de organizaciones multinacionales, todos ellos han encontrado el éxito y el sentido a hacer el bien haciendo el bien. Como me dijo Paul Polman, antiguo CEO de Unilever y cofundador de IMAGINE: "No hay ninguna razón por la que todas las empresas no puedan tener esa misma mentalidad de emprendedor social en la que, en última instancia, estamos tratando de poner estos modelos de negocio regenerativos ahí fuera, que realmente crean suficientes beneficios para que podamos hacer más de lo mismo y entrar en este círculo virtual de hacer de este un mundo mejor, no un mundo que es sólo para unos pocos".