Estas son las 3 habilidades que los líderes necesitan para navegar en la incertidumbre, según LinkedIn

La pandemia mundial causó la mayor agitación en el lugar de trabajo en una generación, con un movimiento sin precedentes en el mercado laboral y un cambio significativo en nuestros patrones de trabajo.

Junto con el cambio hacia el trabajo a distancia y flexible, las empresas de todo el mundo introdujeron muchas iniciativas para apoyar a los empleados, desde planes de asesoramiento y bienestar, descuentos en comidas y abonos a gimnasios, hasta la inversión en aprendizaje y desarrollo. Los empleados experimentaron un nivel de flexibilidad y libertad que no habían encontrado antes.

Dos años más tarde, la balanza de poder está empezando a volver a los empleadores a medida que los nubarrones económicos se acumulan y la contratación se ralentiza. Ya estamos viendo que las empresas congelan la contratación y piden a los empleados que vuelvan a la oficina.

Se ha dicho que "cuando los líderes temen una recesión, su discurso y sus acciones cambian". En LinkedIn, hemos encuestado recientemente a más de 2.900 ejecutivos de nivel C de grandes organizaciones de todo el mundo para entender cómo están afrontando este periodo de incertidumbre, dada la intensa presión a la que se ven sometidos muchos de ellos para gestionar los costes e impulsar la productividad al tiempo que ofrecen rendimientos a los accionistas e inversores.

Preocupantemente, el clima actual está causando la preocupación entre los líderes empresariales de que las empresas se vean obligadas a retroceder en los progresos realizados durante la pandemia en áreas importantes de la vida laboral, como la flexibilidad (68%), el desarrollo de habilidades (74%) y el bienestar de los empleados (75%).

Lo estamos viendo en LinkedIn: un nuevo análisis de las ofertas de trabajo a distancia en LinkedIn muestra que los puestos de trabajo a distancia están disminuyendo. En EE. UU., antes de la pandemia, sólo el 2% de los puestos de trabajo en LinkedIn eran remotos. Esa cifra alcanzó un máximo de casi el 20% en abril de 2022 y ahora ha vuelto al 15%. Esto refleja una tendencia que estamos viendo en países de todo el mundo y es una señal probable de que el trabajo a distancia ha alcanzado su punto máximo.

Nuestros datos ponen de manifiesto que existe una creciente desconexión entre lo que los profesionales desean y lo que los empleadores ofrecen actualmente. Después de la remuneración, los empleados dicen que sus principales prioridades a la hora de considerar posibles empleadores son la flexibilidad, el desarrollo de habilidades y el equilibrio entre la vida laboral y la personal.

Aunque no cabe duda de que habrá que tomar decisiones difíciles, navegar por este ciclo y salir fortalecido depende de una plantilla comprometida y motivada que conozca el negocio, esté conectada entre sí, alineada con la misión de la empresa y apoye la cultura de ésta.

Es probable que muchos líderes empresariales se vean atrapados entre la antigua forma de trabajar y la nueva. Son los que ven este periodo como una oportunidad, los que están preparados para adaptarse e iterar y explorar nuevas formas de trabajar los que saldrán reforzados y superarán a sus competidores a largo plazo. Las tres habilidades fundamentales que necesitan son: comunicación, transparencia y empatía.

Los directivos de las empresas afirman que mantener a sus empleados motivados es su principal prioridad en los próximos meses. La productividad se resiente no cuando la gente trabaja desde casa, sino cuando se les mantiene en la oscuridad, se sienten desoídos y no tienen un apoyo visible. Una comunicación clara, coherente y frecuente es crucial en tiempos de incertidumbre. Construye tu plan y comunícalo. Si sientes que lo has dicho mil veces, es probable que esté empezando a calar. No subestime el poder de la repetición frecuente para hacer llegar su mensaje. Una buena comunicación puede mejorar la moral, hacer que los empleados se sientan vinculados al lugar de trabajo y, por tanto, mejorar la motivación y la productividad.

En períodos de incertidumbre, es fácil que los líderes se aíslen al centrarse en los asuntos inmediatos. Pero es imperativo llevar a sus empleados en ese viaje con usted. No tenga miedo de ser transparente sobre la realidad actual, proporcionando claridad a los profesionales de la empresa a corto plazo para mantener a los empleados centrados y, en la medida de lo posible, asegurando a su plantilla que los tiempos difíciles no durarán para siempre. Recuerde que también es el momento de adaptarse y mantenerse ágil: puede esperar a que pase la tormenta para que le caiga encima la siguiente, o puede cambiar antes de tener que hacerlo y evitar tener que ponerse al día cada vez que surja una nueva serie de circunstancias. La oportunidad puede surgir de la incertidumbre, y son los líderes y las organizaciones que se adaptan los que ganan.

Volver a los estilos de mando y control del liderazgo empresarial y crear una cultura de presentismo y microgestión erosionará rápidamente la confianza. Esto es aún más cierto en un momento en el que los empleados están agobiados por otras preocupaciones fuera del trabajo, como el aumento del coste de la vida. En los últimos años, los empresarios han avanzado mucho en la tarea de ganarse la confianza de sus empleados gracias a los avances en materia de flexibilidad laboral y a la prioridad que se da al bienestar de los trabajadores. Este enfoque ha transformado para bien la forma en que las personas viven el trabajo. Es fundamental ser empático con lo que los empleados valoran más, entender cómo se correlaciona con el rendimiento de la empresa y encontrar formas de protegerlo.

Ahora es el momento de que los líderes empresariales adopten las habilidades que les ayudarán a preparar sus organizaciones para el futuro y a mantener su activo más valioso -su personal- comprometido, motivado e invertido en el éxito futuro de la empresa. Las empresas que salgan reforzadas serán las que tengan visión de futuro, inviertan en su personal y no se limiten a volver a las prácticas anteriores a la pandemia.