Este hombre renunció a su trabajo y construyó una compañía completa para poder hablar con su hija

Clara tiene 10 años y no puede caminar ni hablar porque nació con parálisis cerebral. Ante tanta desgracia, tiene algo a su favor. Su padre es un científico de la computación que renunció a su trabajo para desarrollar una aplicación que le permita comunicarse con su hija.

"La comunicación es la necesidad más básica de un ser humano", dice Carlos Pereira, al explicar los motivos que lo llevaron a desarrollar el software que le da voz a su hija. "Ahora sé mucho sobre mi hija, qué está pensando, de qué es capaz. Ha podido demostrar sus habilidades matemáticas. Quiero que ella pueda demostrar su valor como persona productiva".

Pereira desarrolló la aplicación Livox que utiliza algoritmos especiales para interpretar los desórdenes motores, cognitivos y visuales, así como el aprendizaje automático para predecir y entender qué puede querer o necesitar una persona.

Tome la capacidad básica de tocar un icono en una tableta, por ejemplo. Las personas con discapacidades motrices no tocan una pantalla como las personas sanas: pueden tocar con toda la mano, arrastrar los dedos y realizar frecuentes toques involuntarios. El algoritmo absorbe la forma específica en que una persona toca la tableta y automáticamente comienza a compensar los errores.

El software también puede predecir qué necesidades o palabras es probable que se utilicen en una variedad de situaciones. Alguien podría preguntar, "¿qué te gustaría para el desayuno?" Livox entiende la pregunta y ofrece una serie de opciones comunes, generalmente como iconos que se deben tocar y que luego se convierten en voz audible, si es necesario. En la escuela, el software puede escuchar la pregunta de un maestro y seleccionar la respuesta apropiada a las pruebas de opción múltiple. Mientras más tiempo use Livox una persona en particular, más entenderá y predecirá la respuesta deseada.

Para diseñar su producto, Carlos pasó mucho tiempo con cientos de personas con diferentes necesidades específicas en un centro de rehabilitación en Brasil. Ahora tiene más de 20.000 usuarios, muchos de ellos con síndrome de Down, autismo, parálisis cerebral o esclerosis múltiple. Y la aplicación puede adaptar su interfaz para personas que no pueden leer, ver o comprender conceptos abstractos.

Livox tiene otras dos ventajas clave: es económica y rápida.

La velocidad es sumamente importante en la comunicación dinámica. El físico teórico británico Stephen Hawking, que padece una enfermedad motoneuronal, utiliza uno de los sistemas más sofisticados del mundo para generar el habla. Un pequeño movimiento muscular en la mejilla del profesor Hawking se detecta mediante un interruptor de infrarrojos conectado a sus gafas de lectura, a través de las cuales puede seleccionar un par de letras. Después puede seleccionar una palabra, construir una oración y finalmente enviarla al sintetizador de voz. Pero es un proceso lento, y el propio profesor Hawking ha dicho que se requiere de mucha paciencia.

El costo de los dispositivos de comunicación a menudo es prohibitivo si no se cuenta con un seguro de salud. Uno de los proveedores líderes en los Estados Unidos cobra 10.000 dólares por dispositivo de comunicación de voz, mientras que un dispositivo que se controla con los ojos costaría alrededor de 17.000 dólares. Una licencia de Livox, mientras tanto, cuesta solo 250 dólares, y es compatible con las tabletas más económicas.

La pasión de Pereira por ver a su aplicación al alcance de las personas que la necesitan hizo que Schwab Foundation for Social Entrepreneurship y Folha de São Paulo lo seleccionaran como Emprendedor Social del Año 2017 de Brasil.

Las personas siempre pueden encontrarse con la frustración de no poder comunicarse, dice, ya sea porque tienen un tío que tuvo un accidente cerebrovascular o porque conocen a un niño con autismo.

"Pero lo que quiero que la gente realmente entienda es que las personas con discapacidades son capaces de hacer cosas y pueden ser individuos productivos", dice, cuando se le preguntó qué deseaba lograr al hablar en la Reunión Anual del Foro Económico Mundial en Davos en 2018.

"Quiero persuadir a las personas a que construyan una sociedad más equitativa".

Por el bien de Clara, esperemos que tenga éxito.