El calor extremo está cambiando nuestra forma de vivir. Así es como

El impacto del calor extremo en la salud y el bienestar sigue siendo noticia en todo el mundo.

Este fenómeno está aumentando el impacto de las enfermedades cardíacas en Australia, según un estudio. En Estados Unidos, otro estudio reciente ha demostrado que la exposición prolongada al calor extremo puede modificar el comportamiento de los genes del ser humano y acelerar el envejecimiento a nivel molecular. En Europa, científicos afirman que los cambios en el clima podrían provocar directamente más de dos millones de muertes adicionales relacionadas con la temperatura para finales de siglo si no se toman medidas urgentes.

Con la incidencia de calor extremo cada vez más frecuente e intensa debido a la crisis climática, los expertos afirman que las ciudades, los estados y los países deberían implementar estrategias de preparación y respuesta al calor y proteger a las personas más vulnerables de sus comunidades.

A nivel cotidiano, las personas ya están ajustando su comportamiento para adaptarse a los períodos de calor extremo.

Los últimos 10 años han sido los 10 más cálidos registrados, según la Organización Meteorológica Mundial – y 2024 ha sido el más cálido hasta la fecha. Según datos de Ember, un centro de investigación energética, la demanda de electricidad tuvo un impacto cuantificable en ese año, como consecuencia del uso de aire acondicionado durante las olas de calor extremas.

En los tres mayores mercados eléctricos del mundo (China, EE. UU. e India), las olas de calor añadieron decenas de teravatios hora a la demanda de electricidad durante los meses de verano.

Las necesidades de climatización supusieron un aumento de la demanda del 37% en comparación con el verano anterior en EE. UU., un aumento del 31% en China y un aumento del 19% en India. Los meses más afectados por el calor registraron un gran aumento interanual en la generación de carbón, según Ember.

Ante la previsión de que el uso del aire acondicionado se triplicará para 2050, garantizar el suministro de refrigeración de forma equitativa y sostenible es vital a medida que el mundo se calienta, según la Agencia Internacional de la Energía.

Tomar medidas clave para reducir el consumo de energía de los equipos de refrigeración reduciría drásticamente las emisiones y ampliaría el acceso a refrigeración que podría 'salvar vidas' a 3500 millones de personas, según las Naciones Unidas.

La gente no solo recurre a la refrigeración en casa: el New York Times ha descrito el ventilador personal como "el nuevo accesorio imprescindible" a medida que suben las temperaturas.

Se prevé que el mercado de ventiladores portátiles personales casi se duplicará de aquí a 2033, aunque un informe publicado en The Lancet advierte de que, a temperaturas superiores a 35 °C, los ventiladores eléctricos no lograrán reducir significativamente la temperatura corporal. La publicación también recomienda mejorar el acceso a la refrigeración ambiental, incluyendo el uso de arquitectura ecológica y sombra de árboles en las ciudades para complementar el aire acondicionado.

Si bien estos espacios verdes pueden reducir las temperaturas en las ciudades, en algunos lugares las personas están perdiendo los beneficios para la salud que proporcionan los parques y la naturaleza al cambiar sus hábitos para hacer frente al aumento del calor. Un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts realizado en China descubrió que, en temperaturas extremas, las personas son menos propensas a realizar actividades al aire libre que, de otro modo, formarían parte de su rutina diaria.

Hay quienes están encontrando formas innovadoras de socializar y hacer ejercicio mientras en espacios cubiertos. En el sur de Florida, EE. UU., un grupo local de caminatas al aire libre trasladó sus reuniones a un centro comercial durante los veranos más calurosos.

Van surgiendo otros cambios en las rutinas diarias a medida que la gente se queda en casa cuando hace calor. Investigadores estadounidenses han descubierto una "disminución perceptible" de los viajes de ocio, compras y socialización cuando las temperaturas se disparan.

Mientras tanto, un estudio de Nature sobre 100 ciudades de China entre 2017 y 2023 reveló un aumento significativo de los pedidos de comida a domicilio a la hora del almuerzo a medida que subían las temperaturas.

Como señala el estudio de Nature sobre la entrega de alimentos, este cambio de comportamiento transfiere la exposición al calor extremo de los consumidores a los repartidores.

En todo el mundo, el calor extremo afecta cada vez más a los trabajadores. Además de suponer una amenaza para la salud humana, se prevé que el calor cause pérdidas de productividad por valor de 2,4 billones de dólares anuales para 2030, según el informe del Foro Económico Mundial titulado Asegurarse contra el calor extremo: Navegar por los riesgos en un mundo en calentamiento (Insuring Against Extreme Heat: Navigating Risks in a Warming World).

Los empleadores ya están adoptando un enfoque preventivo, educando a los empleados sobre el estrés térmico y adaptando los horarios de trabajo.

Por ejemplo, los trabajadores agrícolas ya trabajan de noche y otros sectores, como la construcción y el transporte, están trasladando los horarios a las horas más frescas del día.

A medida que el calor extremo y sus múltiples efectos en la vida cotidiana se convierten en una realidad para más personas en todo el mundo, la iniciativa Climate and Health Initiative (Iniciativa sobre el Clima y la Salud) del Foro reúne a diversas partes interesadas y responsables políticos para desarrollar soluciones a los efectos negativos del calentamiento global.