Cómo la minería y los metales pueden apoyar la construcción de megaciudades sostenibles

Se espera que la población de las mil ciudades más grandes e importantes del mundo aumente en más de 500 millones de habitantes de aquí a 2050. África y los países emergentes de Asia-Pacífico experimentarán un crecimiento exponencial de su población, mientras que en muchas ciudades de China, Europa y las regiones avanzadas de Asia-Pacífico las poblaciones se estabilizarán o incluso disminuirán.

Para 2050, se espera que el 70% de la población mundial viva en ciudades, frente al 54% en 2020, un incremento impulsado tanto por el crecimiento demográfico como por una trayectoria continua hacia la urbanización. Actualmente, hay 33 megaciudades en todo el mundo. Para 2050, 14 ciudades más se unirán a ese grupo, elevando el total de su población en alrededor de 213 millones de personas.

Se espera que el crecimiento económico, principalmente en las economías en desarrollo, contribuya a la urbanización, impulsando el crecimiento de las megaciudades y el rápido aumento de la población mundial. Por ello, se espera que el desarrollo de infraestructuras y el crecimiento del sector de la construcción continúe en todo el mundo. Los minerales y metales, que desempeñan un papel fundamental en la construcción, también tendrán que adaptarse a las nuevas necesidades de esta creciente población urbana mundial.

La urbanización y la migración hacia las ciudades están impulsando el crecimiento, la innovación y nuevos enfoques en la construcción de edificios. Este cambio está impulsando la demanda de nuevos métodos de construcción, como los procesos modulares, en los que los edificios se construyen fuera del emplazamiento antes de ser transportados y montados en su ubicación final. Estos métodos facilitan la variación del diseño y la distribución y son más rápidos que los métodos tradicionales. Otra tendencia es la minimización de los residuos a medida que las empresas de construcción mejoran la eficiencia y la calidad de sus procesos.

Al mismo tiempo que crecen estas tendencias, las ciudades en rápida expansión introducen nuevos estándares y requisitos, lo que promueve el desarrollo y la colaboración de la cadena de suministro de la construcción. La creciente preocupación por el calentamiento global y las emisiones de gases de efecto invernadero también aumentan la demanda de materiales sostenibles y reciclables del sector. Por último, las tendencias digitales emergentes y la evolución de la fuerza laboral aceleran la adopción de la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático (ML), la robótica y otras herramientas digitales en toda la industria.

En este contexto, la minería y los metales desempeñan un papel esencial en la construcción moderna. El sector puede apoyar prácticas de construcción sostenibles, resilientes y eficientes proporcionando materiales flexibles, adaptables y fáciles de moldear para aprovechar el espacio, creando vías de producción nuevas y sostenibles.

El acero, por ejemplo, es fundamental para el sector de la construcción, especialmente a medida que las ciudades se expanden y requieren infraestructuras sólidas y duraderas. Su uso posibilita escalar los diseños de edificios, ampliar el uso de construcciones modulares, preservar los sistemas energéticos y promover la circularidad mediante reutilización y reciclaje. En países como India, donde la construcción y las infraestructuras representarán probablemente el 69% de la demanda de acero en 2034, el acero de alta resistencia con mayor tenacidad, conformabilidad y soldabilidad está adquiriendo una importancia vital. Los fabricantes de acero también están adoptando tecnologías de producción más verdes para hacer frente a las preocupaciones sobre las emisiones globales.

El aluminio se valora por su ligereza, solidez y resistencia a la corrosión. Esto lo hace altamente adecuado para la construcción flexible, estéticamente atractiva y reciclable. Su facilidad de moldeado y durabilidad se ajustan bien a los patrones dinámicos de construcción que dan prioridad a la sostenibilidad.

Gracias a su resistencia al fuego y corrosión, el cobre es esencial por su durabilidad, sus cualidades antimicrobianas y su papel en la seguridad de los edificios. La construcción representa casi la mitad del consumo total de cobre y se espera que la demanda aumente debido al incremento de sus aplicaciones en tecnologías de transición energética, como la energía solar.

Otros materiales, como la fibra de carbono, son útiles para reforzar el hormigón y aumentar la durabilidad estructural de las construcciones. La robustez, resistencia a la corrosión y menor huella ecológica de la fibra de carbono la hace adecuada para métodos de construcción costo-eficientes y respetuosos con el medio ambiente.

Los proveedores de metales clave, como el acero, el aluminio y el cobre, deben adaptar sus procesos a las necesidades de un sector de infraestructuras en rápido crecimiento. Y como la agenda de reducción de las emisiones de carbono y la digitalización afectan cada vez más a la industria, los activos, procesos y sistemas de los proveedores deben ajustarse para responder a estos factores.

Esto es crucial no solo para la industria, sino para un desarrollo económico más amplio. La industria de la construcción está profundamente conectada con la economía en general a través de las empresas constructoras, desarrolladoras, proveedoras de material de construcción y contratistas. Sólo el mercado indio de maquinaria y herramientas de construcción está valorado en 14 000 millones de dólares. Los materiales clave, como el acero, el cemento y la madera, cuya producción requiere gran cantidad de trabajo e implica largas cadenas de valor en sectores como el metalúrgico y el logístico, generan 25 000 millones de dólares anuales.

Aunque la demanda de la construcción crece debido a la urbanización y al continuo aumento de las megaciudades, el sector se enfrenta a varios retos. He aquí cómo el sector metalúrgico y minero podría desempeñar un papel crucial en la resolución de algunos de estos problemas.

La escasez de talentos, la IA y la invasión de las tecnologías digitales, el menor número de nuevas contrataciones para mejorar la productividad, la eficiencia y la seguridad de los trabajadores son algunas de las áreas de preocupación para el sector de la construcción. Cada vez más se considera en la industria aumentar la contratación de científicos de datos y desarrolladores de software para hacer frente a estos retos.

La producción de acero y cemento, los principales insumos de la construcción, resulta en grandes emisores de gases de efecto invernadero. Las empresas manufactureras globales de estos materiales deben centrarse en la reconfiguración de activos, inversión en nuevos activos y procesos para adoptar los principios clave de sostenibilidad, ciclicidad de los materiales y reducción de emisiones. El desarrollo de la industria del acero verde avanza lentamente a través de inversiones, formulación de políticas públicas, alianzas y colaboración.

El sector de la construcción se enfrenta a un cambio desde un proceso de contratación táctica, diseñada para cumplir los presupuestos, hacia una contratación estratégica, con el objetivo de reducir la complejidad, generar valor y crear ecosistemas estratégicos de abastecimiento y prestación de servicios. De este modo se abordarán las continuas presiones sobre costos, riesgos de la cadena de suministro, exigencias de los clientes y necesidad de contar con colaboradores en términos de fuerza laboral, materiales y tecnología.

Los proveedores de metales y materiales de minería deben colaborar con el sector de la construcción para apoyar esta tendencia de abastecimiento estratégico. Pueden hacerlo ofreciendo soluciones integradas para la cadena de suministro, plataformas digitales para mejorar la transparencia y modelos de contratación flexibles. Esto agilizaría el flujo de materiales, mejoraría el intercambio de datos para fines de sostenibilidad y cumplimiento y estabilizaría los costos durante los períodos de volatilidad del mercado. Las empresas constructoras se beneficiarían de una menor complejidad, de la mitigación de los riesgos de la cadena de suministro y de alianzas más resilientes.

El sector está desplegando tecnologías de Industria 4.0, como la gestión de la información para proyectos de construcción (BIM), inteligencia artificial y aprendizaje automático, gemelos digitales, así como la supervisión remota de proyectos utilizando sensores, robótica y drones. Esto permite tomar decisiones basadas en datos, impulsa una programación dinámica de obras y reduce las desviaciones en el presupuesto y el calendario, a menudo en múltiples emplazamientos.

Los proveedores de metales pueden colaborar en este tipo de digitalización compartiendo datos y conocimientos. Esto ayudaría a mejorar los sistemas de programación y mantenimiento, proporcionando visibilidad y mejoras operativas en todo el ciclo de vida del proyecto y mejorando la eficiencia general de los procesos.

Este tipo de construcción permite mejoras en el diseño, control de calidad y reducción de los plazos de entrega. Pero requiere un ecosistema estratégico y colaborativo de proveedores y prestadores de servicios, y la evaluación de operaciones de fabricación a largo plazo. Los fabricantes de metales y materiales flexibles y adaptables, como el acero y el aluminio, serán una parte crucial de este ecosistema en desarrollo para hacer frente a la demanda de construcción modular.

La urbanización, y la creciente demanda de infraestructuras que genera, está desencadenando diversos cambios y oportunidades de crecimiento para el sector de la construcción.

Además de las tendencias emergentes, como la construcción modular, más eficiente y sostenible, la digitalización también está reconfigurando el sector. Los proveedores de metales y materiales están haciendo evolucionar sus tecnologías y el sector está adoptando elementos facilitadores clave, como herramientas digitales y colaboración entre proveedores para afrontar estos retos.

La colaboración entre la industria de la construcción y los proveedores de metales y materiales de acero, aluminio, cobre y otros garantizará que todos estos sectores industriales puedan atender y beneficiarse de estas tendencias económicas emergentes.