¿Crisis hídrica? La razón por la que no podemos subestimar la escasez de agua en EE. UU.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua se celebrará en Nueva York en marzo de este año y es la primera reunión de la ONU dedicada exclusivamente al agua desde 1977.

El agua es un derecho humano fundamental y uno de los debates críticos de la Conferencia del Agua abordará cómo los gobiernos, las empresas y las organizaciones pueden proporcionar agua potable y saneamiento a las comunidades.

Con más del 40% de la población mundial afectada por condiciones de escasez de agua, la Conferencia del Agua podría centrarse en los países en desarrollo gravemente afectados por la escasez de agua. ¿Y por qué no? La escasez de agua es un problema enorme en los países en desarrollo.

Pero el acceso a agua potable suficiente, segura y accesible no es sólo un problema del mundo en desarrollo.

Demasiados estadounidenses siguen enfrentándose a la inseguridad del agua debido al agotamiento de las aguas subterráneas, los problemas de infraestructuras, las condiciones del cambio climático y la contaminación, lo que tiene efectos devastadores en la salud pública y la prosperidad de las comunidades.

En respuesta a los problemas de escasez de agua, algunas comunidades están adoptando soluciones fuera de la red para gestionar y proporcionar acceso al agua. Estas soluciones incluyen sistemas de tratamiento de residuos en ciudades más pequeñas, reutilización y captación de agua de lluvia. Suena muy bien en teoría, pero muchas comunidades necesitan más financiación o están en largas listas de aprobación para adoptar nuevas tecnologías o infraestructuras y dependen de organizaciones comunitarias para acceder al agua potable.

Las empresas y los gobiernos estadounidenses deben apoyar a las organizaciones comunitarias que se ocupan de los problemas de acceso al agua en Estados Unidos. Estas organizaciones educan a las partes interesadas sobre los problemas del agua en la comunidad, prestan apoyo práctico para financiar programas de acarreo de agua e instalan y gestionan equipos fundamentales, como depósitos, sistemas de filtración e incluso lavabos, para garantizar la igualdad de acceso al agua potable.

DigDeep, una organización de derechos humanos sin ánimo de lucro dedicada a garantizar que todos los estadounidenses dispongan de agua limpia, informa de que en Estados Unidos hay 2,2 millones de personas sin agua corriente ni plomería interior básica y muchas más sin un saneamiento adecuado. Además, más de 44 millones de personas se abastecen de sistemas de agua inadecuados que recientemente han infringido la Ley de Agua Potable Segura.

DigDeep y la US Water Alliance (Alianza Americana para el Agua) han recomendado que una forma fundamental de abordar el acceso al agua y las desigualdades a las que se enfrentan las personas vulnerables es reconocer públicamente que el acceso al agua en Estados Unidos vive una crisis.

"La brecha en el acceso al agua cuesta a la economía estadounidense unos 8600 millones de dólares al año y sigue sin resolverse", afirmó George McGraw, director general y fundador de DigDeep. "Sin embargo, también descubrimos que hay esperanza: por cada dólar invertido en cerrar la brecha del agua, la economía estadounidense vería un retorno de casi cinco veces. Debemos cerrar la brecha de acceso al agua. Como muestra la investigación, no podemos permitirnos no hacerlo".

En California hay más de 2 millones de pozos privados que acceden a aguas subterráneas. Pero debido a las condiciones de sequía, al excesivo bombeo industrial de los acuíferos y a los pozos industriales de mayor profundidad recién perforados, las comunidades locales luchan por acceder a un agua adecuada. Se trata de un problema crítico en regiones como el Valle Central de California, donde el 95% de las familias dependen del agua subterránea para uso doméstico.

El problema se agrava porque el bombeo y el bajo nivel de las aguas subterráneas han contribuido a la liberación de metales pesados y otras toxinas de la arcilla u otras estructuras subterráneas naturales en los pozos y el agua de la comunidad.

Las recientes tormentas e inundaciones también han agravado el problema con la intrusión de aguas pluviales y el fallo de los sistemas sépticos de saneamiento privados, lo que ha inutilizado muchos pozos privados.

Self-Help Enterprises, organización de desarrollo comunitario de California, presta servicios esenciales y de emergencia. Su oferta de servicios incluye la explotación de un depósito y un programa de acarreo de agua para muchas comunidades de bajos ingresos del Valle Central de California que carecen de infraestructuras adecuadas de vivienda, agua y alcantarillado. Self-Help proporciona agua transportada a casi 2000 hogares, agua embotellada a 4000 y realiza análisis periódicos de la calidad del agua a 100 familias.

"Las graves condiciones medioambientales afectan a la calidad, la cantidad, la disponibilidad y el acceso al agua potable. Las comunidades desfavorecidas, especialmente en el valle de San Joaquín, que ya se enfrentan a un acceso limitado o nulo a las infraestructuras y dependen de las aguas subterráneas para sus actividades vitales, se enfrentan ahora a una mayor incertidumbre en el acceso al agua potable. Se espera que en los próximos 12 meses aumente el número de familias que necesitan acceso a agua potable limpia y segura", declaró Tami McVay, directora de servicios de emergencia de Self-Help Enterprises.

Concienciar sobre los problemas asociados a la falta de agua potable es necesario para impulsar la acción de las partes interesadas. Por ejemplo, la Fundación Thirst, una organización sin ánimo de lucro dedicada a impulsar el suministro de agua potable y saneamiento a todos los habitantes del planeta, ha llegado a más de un millón de personas a través de campañas no tradicionales.

Mina Guli, fundadora de la Fundación Thirst, lleva la concienciación y la educación a comunidades de todo el mundo a través de campañas que incluyen carreras de maratón como en su más reciente, Run Blue.

El objetivo de Mina es completar 200 maratones, recorriendo ciudades con estrés hídrico en casi todos los continentes y terminando en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua en Nueva York. La campaña de maratón de Mina incluye ciudades estadounidenses con problemas de escasez de agua.

La Fundación Thirst y Mina creen que "el acceso al agua debería ser universal. Las empresas representan actualmente una gran proporción del uso mundial de agua dulce, lo que significa que las empresas pueden convertirse en los mayores solucionadores de problemas relacionados con el agua."

Mina anima a las empresas estadounidenses y mundiales a que evalúen su riesgo hídrico, comprendan dónde necesitan mejorar y pongan en marcha un plan para perfeccionar su uso del agua.

La escasez de agua es un problema mundial, pero los retos son exclusivamente regionales, por lo que no existe una solución milagrosa. Cada región y comunidad se enfrentará a diferentes problemas de acceso, calidad y fiabilidad. Las empresas deben escuchar a las organizaciones que trabajan sobre el terreno con comunidades que conocen a fondo los problemas del agua.

Hay 2,2 millones de razones humanas identificadas para resolver los problemas de acceso al agua en Estados Unidos. Por lo tanto, a la hora de considerar los compromisos en materia de agua en la Conferencia de la ONU sobre el Agua que se celebrará en marzo, las empresas estadounidenses deben apoyar por igual a las organizaciones que se ocupan de los problemas de escasez de agua en las comunidades de los países en desarrollo y de Estados Unidos, ya que el acceso al agua es un derecho humano universal, independientemente de su ubicación.