En el primer semestre de 2018, México pisará por primera vez la Luna

En el primer semestre de 2018, México pisará por primera vez la Luna. No lo hará a través de una persona, como lo hiciera Estados Unidos con el comandante Neil Armstrong en julio de 1969, pero sí a través de un proyecto multinacional.

Ese año, en una fecha aún por definir, una serie de robots, enviados desde la Tierra en una sonda, descenderán en la superficie y se ensamblarán por sí mismos, para después realizar experimentos de construcción de edificaciones como estaciones espaciales o incluso infraestructura para la futura colonización de planetas.

“Esto es muy importante para las futuras acciones de construcción de dispositivos en el espacio, si quieres una estación espacial no la puedes lanzar desde la Tierra, la tienes que ir construyendo, si quieres un hábitat en la Luna, si quieres una base de lanzamiento en la Luna, en Marte, en asteroides, necesitas irla construyendo y esto podría parecer un poco irreal en México, pero ya lo estamos haciendo”, asegura el director General de Agencia Espacial Mexicana (AEM), Javier Mendieta Jiménez.

De concretarse con éxito, México se convertirá en el primer país latinoamericano en alunizar un dispositivo útil, que será enviado a través de la sonda “Griffin Lunar Lander”, propiedad de la empresa Astrobotic de la NASA y financiado entre otros fondos con recursos delConsejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

En una entrevista con Alto Nivel, Mendieta señala que, para este proyecto, trabajan 19 instituciones de investigación y desarrollo de una docena de países.

“En las misiones espaciales ya sean tripuladas o robóticas ya ningún país puede por sí mismo, se necesita la cooperación internacional, anteriormente había solo dos potencias que cada uno podía lanzar independientemente, hoy están cooperando de manera muy activa”, dice.

¿Comienza la carrera espacial?

Javier Mendieta Jiménez asegura que la posibilidad de que México envíe una misión tripulada por humanos o robots a Marte o la Luna aún está fuera de sus posibilidades. Con apenas seis años de vida, la AEM piensa más en función de proyectos dentro de la órbita de la Tierra.

“Naturalmente estas misiones son muy interesantes, pero no son prioritarias por el momento, lo prioritario son las comunicaciones, ir al espacio para poder voltear a la Tierra, para nuestra conectividad, para las imágenes que nos dan los satélites para atender desastres naturales como inundaciones, huracanes, incendios, vulcanismo, etcétera”.

La AEM enfoca sus recursos materiales y técnicos en continuar la carrera satelital que México emprendió en 1982, cuando puso en órbita su primer sistema de satélites, el Morelos 1 y 2, que darían cobertura al territorio nacional en telefonía, televisión y datos.

México puso en órbita su más reciente satélite (Morelos 3) el 2 de octubre de 2015 y es operado por ingenieros mexicanos desde los centros de control de Iztapalapa y Hermosillo.

Este satélite ayuda en las comunicaciones de unidades de tierra, mar y aire, ampliamente utilizado por elementos del Ejército y la Marina.

El negocio de la industria aeroespacial

México es actualmente el cuarto destino mundial en inversión de manufactura espacial y es el sexto proveedor en este ramo de Estados Unidos, según información del secretario mexicano de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, revelada durante la edición 67 del Congreso Internacional de Astronáutica (IAC por sus siglas en inglés), que actualmente se lleva a cabo en Guadalajara.

La industria aeroespacial mexicana registra un crecimiento sostenido de 16% anual y cuenta con más de 325 empresas establecidas en 20 de los 32 estados del país, lo que genera unos 45,000 empleos.

El Congreso Internacional de Astronáutica reúne del 26 al 30 de septiembre a científicos de 70 países, entre los que se encuentran los directores de las Agencias Espaciales más importantes del mundo, como la NASA (National Aeronautics and Space Administration), la Agencia Espacial Europea, la Federación Rusa y las agencias de Japón, China, Canadá e India, entre otras.