¿Cómo aumentar el número de mujeres empresarias?

Europa necesita más empresarios, pero ¿cómo podemos hacer que aumente el porcentaje de mujeres empresarias en el continente, que actualmente es inferior al 30%?

Un nuevo estudio publicado por la Organización Mundial del Trabajo en diciembre examina el impacto que la promoción de mujeres empresarias tiene en el éxito de las empresas de nueva creación, su supervivencia, el crecimiento de su negocio y sus prácticas. Aunque el estudio se centra más específicamente en Asia, África y América que en Europa, saca conclusiones que son aplicables al entorno empresarial europeo. Entre estas conclusiones vemos que aunque la formación empresarial y el acceso a la financiación son útiles, resultan ineficaces para fomentar la creación de empresas propias. No obstante, el estudio descubrió que una combinación de formación empresarial seguida de una tutoría y formación personalizadas en capacidades de negocio, así como subvenciones para obtener créditos a largo plazo, estimulaban a las mujeres a convertirse en empresarias.

Modelos y tutores

Algunos estudios realizados en la India muestran que cuando las mujeres apoyan a otras mujeres empresarias mediante aprendizaje y tutoría se obtienen mejores resultados que únicamente con programas de formación empresarial. Este es un aspecto en el que hace hincapié JA-YE Europe en sus programas de educación empresarial. En Noruega, JA-YE lleva a cabo el programa KAN (Red de Ambiciones de Mujeres), un evento de tres días de duración en que se invita a empresarias de éxito para que hablen ante estudiantes femeninas de educación superior. El objetivo del programa es constituir una red de mujeres que desean convertirse en dirigentes o fundar su propia empresa. Este aspecto es muy importante, sobre todo en vista de que el número de empresarias en Noruega está disminuyendo. Con el apoyo de la iniciativa Innovación Noruega del Gobierno de ese país, el programa se ha realizado durante ocho años. Aunque las mujeres pueden rehuir el riesgo de iniciar su propia empresa, existen evidencias que muestran que a menudo asumen el papel de líderes en empresas de nueva creación.

En nuestros programas de formación empresarial lo vemos con mucha frecuencia. En nuestro programa de empresa, en el que los alumnos trabajan en equipos mixtos, el equilibrio entre los géneros dentro de un grupo puede determinar el principal producto o servicio de la empresa. Sin embargo, las chicas avanzan con rapidez, naturalidad y facilidad a posiciones de liderazgo y ocupan el puesto de directora general de la empresa estudiantil. Observamos que las chicas necesitan más estructura, apoyo y tutoría que los chicos. El hecho de mostrar a las chicas que existen empresarias de éxito puede abrirles los ojos hacia otras opciones profesionales e infundirles ambición. JA-YE Europe siempre busca nuevas voluntarias procedentes del mundo de los negocios para que actúen como tutoras de las chicas y chicos de nuestros programas educativos.

¿Dónde están todas las estudiantes de ciencias, tecnologías, ingeniería y matemáticas?

Europa tiene un problema, pues necesita más empresarios en el sector de la ciencia, tecnologías, ingeniería y matemáticas en general. Hemos observado que las chicas tienen una facilidad natural para estas materias una vez que les cogen el gusto. Les encanta la biología, la química y las ciencias neurológicas. En Italia, el proyecto La Nuvola Rosa, que presentará su tercera edición en la feria Expo 2015 que se celebrará en Milán, organiza seminarios y cursos para incentivar a mujeres de 17 a 24 años de edad para que estudien ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, ya sea como materia principal o materia complementaria en otros cursos de formación.

Roberta Cocco, jefa de responsabilidad social corporativa de Microsoft Italia y coordinadora del proyecto La Nuvola Rosa les dice lo siguiente: “Tenéis que incluir un componente tecnológico en vuestros estudios, ya sea para obtener un empleo o para fundar vuestra propia empresa. Las empresas necesitan una formación más específica que el simple conocimiento de las redes sociales.” Quieren competencias tecnológicas de inmediato; existe una enorme diferencia entre lo que buscan las empresas y lo que pueden ofrecer los graduados. La conclusión es que los formadores tienen que ampliar el espectro de materias que se ofrecen a las chicas para que incluyan la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, materias a las que estas no se sienten atraídas por naturaleza.

Por último un informe del Foro señala que cada vez más mujeres tienen la confianza para asumir el riesgo de convertirse en empresarias cuando en la escuela y en la universidad tienen la oportunidad de adquirir determinadas capacidades y conocimientos técnicos mediante métodos de aprendizaje basado en la práctica. Joni Simpson, de la OIT, hace la siguiente recomendación: “Debemos conectar los programas de formación empresarial con otras ayudas para las empresas (como los concursos de planes de negocio, programas de tutoría, servicios financieros, grupos de contacto, etc.) para promover la próxima generación de empresarias.” Estamos totalmente de acuerdo en que lo que realmente tiene impacto es la combinación correcta de enfoques y colaboraciones.

Autora: Caroline Jenner es directora general de JA-YE Europe.

Imagen: REUTERS/Zohra Bensemra