Cómo desbloquear el valor de la infraestructura de movilidad conectada

Las infraestructuras conectadas pueden revolucionar nuestra forma de movernos, haciendo que la movilidad por carretera sea más eficiente, segura y limpia. Cuatro casos de uso clave encabezan la agenda de colaboración público-privada:

La recarga inteligente de vehículos eléctricos (VE) proporciona datos en tiempo real sobre la disponibilidad de las estaciones de recarga, optimiza los horarios de recarga y ofrece una experiencia fluida. Esto, a su vez, contribuye a reducir la incertidumbre en torno a la recarga y acelera la adopción de VE. También contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación atmosférica.

La información sobre tráfico y accidentes en tiempo real puede mejorar la fluidez del tráfico y aumentar la seguridad vial. Al ajustar dinámicamente los tiempos de los ciclos de los semáforos, podríamos optimizar la capacidad de la carretera para el tráfico existente. La gestión avanzada del tráfico permitiría avisar a los vehículos sobre objetos en la calle.

El estacionamiento inteligente utiliza datos en tiempo real de sensores y cámaras para guiar a los conductores hasta las plazas disponibles. Los vehículos definidos por software (SDV) pueden obtener la información necesaria para reservar y pagar directamente una plaza de estacionamiento antes de llegar a su destino. Esto reduce la búsqueda de plazas, con los consiguientes beneficios en tiempo, congestión y emisiones.

Los peajes adaptables facilitan la gestión eficaz del flujo de tráfico. Pueden incluir una tarificación variable en función, por ejemplo, de los niveles de congestión y contaminación. En la actualidad, ya se utilizan transpondedores de terceros y sistemas de reconocimiento de matrículas para el cobro de peajes. Los vehículos definidos por software pueden proporcionar un nuevo mecanismo de cobro de peajes, integrando aún más ese proceso en el sistema general de comunicación entre el transporte conectado, conocido como vehicle-to-everything (V2X).

Estos casos de uso adquieren aún más importancia cuando no hay un ser humano en el bucle, es decir, con el despliegue de vehículos autónomos. Los vehículos autónomos se benefician de la comunicación entre vehículos e infraestructuras, lo que garantiza una movilidad segura y eficiente y facilita el estacionamiento, la recarga y el cobro de peajes.

La comunidad "Automotive in the Software-Driven Era" (Automoción en la era del software), que forma parte de la iniciativa DRIVE-A, ha identificado seis acciones clave para liberar todo el potencial de las infraestructuras inteligentes de transporte por carretera y, con ello, aprovechar los beneficios potenciales del ecosistema de vehículos definidos por software. Estas seis acciones se basan en tres principios: colaboración, innovación y eficiencia:

El avance de las infraestructuras inteligentes requiere un esfuerzo de colaboración entre los agentes implicados. La figura 2, a continuación, ofrece un marco de colaboración y áreas de colaboración clave. Las asociaciones público-privadas ayudan a construir una red de infraestructuras inteligentes sólida, cohesionada e integradora.

Paul Farrell, Vicepresidente Ejecutivo y jefe de Estrategia de BorgWarner, destaca algunos de los retos y la importancia de este tipo de colaboraciones: "La colaboración en torno a la infraestructura es muy compleja y multidisciplinar. Implica cuestiones sobre quién es el propietario de los datos, quién suministra el hardware, quién lo instala y quién lo integra en soluciones holísticas. Sin embargo, es clave para, por ejemplo, avanzar en la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos que requiere la transición a la electrificación."

Para aprovechar las ventajas de las infraestructuras inteligentes, es esencial compartir los datos. Según Philippe Hahn, jefe de Tecnología y Vicepresidente global de desarrollo y operaciones de Yunex Traffic: "La tecnología ya es capaz de crear un gemelo digital de las intersecciones de las carreteras y proveer información sobre situaciones peligrosas en tiempo real a los vehículos y a los usuarios vulnerables de la carretera. Pero para desplegar esta tecnología en situaciones reales, necesitamos compartir datos de forma colaborativa."

Hay tres cosas que contribuyen a acelerar el intercambio de datos: alianzas competitivas, en las que todos salen ganando; acuerdo sobre datos específicos que deben compartirse para crear valor adicional; y acuerdo sobre los procesos de gestión e intercambio de datos.

Ya existen algunos ejemplos regionales de políticas de intercambio de datos en el ámbito de la recarga de vehículos eléctricos (por ejemplo, el Espacio Europeo Común de Datos Energéticos). Sin embargo, aún no se ha desarrollado un enfoque holístico a escala.

Los estándares unificados y protocolos de conectividad son necesarios para crear una red de transporte más interconectada. Permiten que distintos agentes presten servicios a través de diversos tipos de infraestructuras, lo que posibilita una cobertura más sólida y una mayor flexibilidad para los usuarios. La estandarización puede fomentar un sistema cohesivo e interoperable que beneficie a la industria y al público general.

Se puede crear valor adicional cuando existe una integración más profunda entre los vehículos definidos por software y la infraestructura inteligente que los rodea. Esta integración conduce a una experiencia de usuario más fluida. MTR Lab está impulsando esta integración en Hong Kong: "Estamos creando una plataforma que ofrece una solución unificada de estacionamiento: incluye la búsqueda y el pago de estacionamiento con recarga de vehículos eléctricos en centros comerciales", explicó Michael Chan, Director General de MTR Lab.

La integración profunda entre vehículos e infraestructuras inteligentes también ayuda a cerrar el "bucle de comunicación", permitiendo que el ecosistema recopile información de los usuarios a través de la interfaz hombre-máquina del vehículo para obtener datos más precisos (por ejemplo, la disponibilidad de estacionamiento).

Las infraestructuras inteligentes no son baratas. De ahí que optimizar su uso es clave para reducir costes y aumentar la viabilidad financiera. Esto incluye un mejor diseño y ubicación de las infraestructuras inteligentes. Los datos son necesarios para tomar decisiones informadas.

Fujitsu tiene una experiencia reciente al respecto: "Hemos observado que tener en cuenta la combinación energética y la colaboración intersectorial de datos es clave para optimizar los planes de recarga de vehículos eléctricos, lo que reduce las emisiones de CO2 y hace realidad la descarbonización del transporte.

"Reuniendo datos de distintas partes interesadas, hemos simulado un plan de carga óptimo en un gemelo digital, lo que ha permitido reducir en un 15% las emisiones de CO2, gracias a una mayor utilización de energía verde y a la optimización de los patrones de carga", declaró Shunichi Ko, Vicepresidente Senior y Director de la Unidad de Negocio de Soluciones Transversales de Fujitsu.

Aunque muchos casos de uso requieren un esfuerzo sistemático (por ejemplo, disponer de un marco de accesibilidad a los datos), un enfoque general de las infraestructuras inteligentes tiene un potencial de aplicación limitado en el mundo real.

Es importante que cada colaboración aborde un problema concreto de transporte o movilidad (por ejemplo, la recarga de vehículos eléctricos para flotas de reparto urbano o el estacionamiento en zonas muy congestionadas). Este enfoque específico ayuda a garantizar casos de negocio con un claro valor social y económico, lo que facilita la financiación y la colaboración.