Urban Transformation

Oklahoma en 1889 y el nacimiento de las ciudades

Con la colaboración de Nada es gratis.
The state of Texas is captured by one of the NASA Expedition 36 crew members aboard the International Space Station, some 240 miles above Earth, used a 50mm lens in this image released on June 27, 2013. The largest metro area, Dallas-Fort Worth, often referred to informally as the Metroplex, is the heavily cloud-covered area at the top center of the photo. Neighboring Oklahoma, on the north side of the Red River, less than 100 miles to the north of the Metroplex, appears to be experiencing thunderstorms. The Houston metropolitan area, including the coastal city of Galveston, is at lower right. To the east near the Texas border with Louisiana, the metropolitan area of Beaumont-Port Arthur appears as a smaller blotch of light, also hugging the coast of the Texas Gulf. Moving inland to the left side of the picture one can delineate the San Antonio metro area. The capital city of Austin can be seen to the northeast of San Antonio.  REUTERS/NASA/Handout via Reuters  (UNITED STATES - Tags: ENERGY SCIENCE TECHNOLOGY CITYSCAPE) ATTENTION EDITORS - FOR EDITORIAL USE ONLY. NOT FOR SALE FOR MARKETING OR ADVERTISING CAMPAIGNS. THIS IMAGE HAS BEEN SUPPLIED BY A THIRD PARTY. IT IS DISTRIBUTED, EXACTLY AS RECEIVED BY REUTERS, AS A SERVICE TO CLIENTS - RTX113J4

Imagen del Estado de Texas Image: REUTERS/NASA

David Cuberes
Doctor en Economía , University of Chicago
Comparte:
Nuestro impacto
¿Qué está haciendo el Foro Económico Mundial para acelerar la acción en Urban Transformation??
La visión global
Explora y monitorea cómo Cities and Urbanization afecta a las economías, las industrias y los problemas globales
A hand holding a looking glass by a lake
Innovación mediante crowdsourcing
Involúcrate con nuestra plataforma digital de crowdsourcing para lograr un impacto a escala
Mantente al día:

Cities and Urbanization

¿Cuáles son los determinantes históricos del crecimiento de las ciudades? Una cuestión relacionada con esto es entender por qué las ciudades se crean en un determinado territorio y no en otro. Sin pensarlo demasiado, la respuesta a esta pregunta puede parecer obvia: la gente va simplemente donde otra gente ya vivía inicialmente, beneficiándose de lo que los economistas llamamos economías de aglomeración. Al fin y al cabo, es más sencillo encontrar trabajo en localidades más pobladas y abrir un negocio tiene más sentido en territorios con alta densidad de población que en el medio del desierto.

Pero esto no responde a mi pregunta inicial. Si uno pudiera imaginar un territorio completamente vacío y fuera posible abrir ese territorio a un gran número de personas que pudieran elegir libremente donde construir su casa, ¿a dónde irían? El problema es que es prácticamente imposible pensar en una situación como la que describo. Tal vez un candidato seria la colonización de América del Norte por los británicos allá por el siglo XVI. Los británicos intentaron por primera vez establecer una colonia en la isla de Roanoke, en lo que hoy forma parte de Carolina del Norte. Fracasaron de forma estrepitosa, pero voy a dejar la discusión de lo que allí sucedió para otra entrada. Es cierto que gran parte de Norte América estaba prácticamente deshabitada en esa época- las tribus de Nativo americanos ocupaban una pequeñísima fracción del territorio. Sin embargo, la llegada de colonos británicos tuvo lugar en sucesivas oleadas y, solo tras varios intentos se consiguió establecer un asentamiento exitoso en Jamestown, en el actual estado de Virginia. Así pues, este experimento no ayuda a contestar la pregunta ya que las expediciones de inmigrantes que llegaron después del asentamiento de Jamestown ya tenían un punto claro de referencia, es decir ya se pudieron beneficiar de esta aglomeración inicial.

Pero la historia nos ofrece un precioso evento (tal vez el único) que reúne las características necesarias para entender cómo se originan las ciudades en un territorio despoblado. En el año 1889, el Presidente de Estados Unidos Benjamin Harrison sucumbió a las enormes presiones de compañías ferroviarias, township companies (algo así como empresas promotoras de construcción) y en general un gran número de ciudadanos mayoritariamente blancos que querían ocupar el último espacio disponible en todo Estados Unidos: un territorio de 2 millones de acres conocido como las Unassigned Lands (tierras no asignadas). Años atrás, las tribus nativo americanas habían sido paulatinamente desplazadas (casi siempre de forma forzada) a territorios al este del río Mississippi para poder disponer de sus tierras. La mayor de estas oleadas de emigración forzada tuvo lugar alrededor de 1830 en el tristemente célebre Trail of Tears (sendero de lágrimas) donde se calcula que un tercio de la población de estas tribus murió debido a las enfermedades asociadas a las bajísimas temperaturas y la falta de agua y comida durante el éxodo. Casi todas las tribus fueron recolocadas en lo que es hoy el estado de Oklahoma. Sin embargo, por diferentes motivos, ninguno de los múltiples tratados que se firmaron en esa época dando derechos exclusivos a los nativo americanos en territorios específicos hacía referencia a dichas Unassigned Lands, marcadas en blanco en el centro del siguiente mapa.

Así pues, minutos antes de las doce del mediodía del 22 de abril de 1889, unos 20,000 individuos esperaron ansiosamente el pistoletazo de salida que les permitiera alcanzar su sueño: 160 acres (unos 80 estadios de fútbol) completamente gratuitos para el primero que reclamara una parcela. Lo único que había que hacer era ser el primero en plantar una banderita en uno de estos enormes cuadrados y construir algo de valor en ellos en los siguientes 5 años. Un auténtico regalo- la última posibilidad de vivir el sueño americano de conseguir tierra gratis en el Far West.

En un reciente trabajo con John Brown, de Clark University, estudiamos el Oklahoma Land Run de 1889 en detalle. Después de esfuerzos titánicos hemos conseguido juntar datos que contienen el nombre de cada uno de los colonos de 1889, su edad, raza, su capital humano (si sabían leer o escribir) y de que estado venían, entre otras características. Otra base de datos nos permite saber su ocupación y posiblemente algún indicador de su riqueza. Con toda esta información, nuestro plan es intentar responder diferentes preguntas sobre como funcionó el proceso de urbanización en este particular episodio.

La principal pregunta que nos hicimos inicialmente es si las ventajas geográficas de especificas áreas de las Unassigned Lands jugaron un papel determinante para entender donde se establecieron los individuos y familias en los días y meses posteriores al Land Run. Nuestros resultados preliminares muestran que, efectivamente, las mayores concentraciones de población meses después de abril de 1889 tuvieron lugar cerca de la única vía de ferrocarril existente (la línea de Santa Fe), pero, curiosamente, no demasiado cerca de los ríos otra –potencialmente- importante vía de comunicación. Esto se puede ver claramente en el siguiente mapa, donde dos de las principales aglomeraciones e 1889- Oklahoma City y Guthrie- están situadas en la misma línea del ferrocarril (en morado en el mapa).

Otra pregunta interesante es si estas ventajas geográficas dominaron a las economías de aglomeración en las siguientes décadas. Varios trabajos demuestran que la geografía o la infraestructura inicial a menudo tienen enorme persistencia (ver por ejemplo este trabajode Hoyt Bleakley y Jeff Lin sobre los puertos). Nuestros resultados sugieren que, en realidad, la importancia de estas ventajas físicas fue disminuyendo a medida que paso el tiempo. Tal vez las proliferaciones de más líneas ferroviarias hicieron que la línea inicial dejara de ser fundamental.

Por otro lado, más allá del deplorable trato que recibieron las tribus nativo americanas durante esos años, la asignación de estas tierras de forma gratuita puede entenderse como una sustancial política redistributiva. Los documentos de la época sugieren que muchos de los participantes en el Land Run eran individuos de renta media o baja que tenían mucho que ganar con este proceso. En el futuro nos gustaría estudiar en qué medida la fortuna de estos individuos y sus familias aumentó en las siguientes décadas, en línea con el trabajo de Hoyt Bleakley y Joseph Ferrie que estudian la lotería de asignación de tierras en el estado de Georgia (ver aquí).

Por cierto, para los interesados en una versión fácil de digerir sobre un episodio parecido a éste, Tom Cruise y Nicole Kidman protagonizaron hace años la película Far and Away que refleja muy bien al menos las espectaculares cabalgatas de los participantes para conseguir su pedazo de tierra.

No te pierdas ninguna actualización sobre este tema

Crea una cuenta gratuita y accede a tu colección personalizada de contenidos con nuestras últimas publicaciones y análisis.

Inscríbete de forma gratuita

Licencia y republicación

Los artículos del Foro Económico Mundial pueden volver a publicarse de acuerdo con la Licencia Pública Internacional Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0, y de acuerdo con nuestras condiciones de uso.

Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no del Foro Económico Mundial.

Comparte:
World Economic Forum logo
Agenda Global

La Agenda Semanal

Una actualización semanal de los temas más importantes de la agenda global

Suscríbete hoy

Puedes anular tu suscripción en cualquier momento utilizando el enlace que figura en nuestros correos electrónicos. Para obtener más información, consulta nuestro Política de privacidad.

Reducing Embodied Carbon in Cities: Nine Solutions for Greener Buildings and Communities

Victoria Masterson

27 de marzo de 2024

Sobre nosostros

Eventos

Medios

Socios y Miembros

  • Únete

Ediciones en otros idiomas

Política de privacidad y normas de uso

© 2024 Foro Económico Mundial