Estos son los mejores países de Europa para ser autónomo, según Doing Business

Como cada año, el Banco Mundial ha publicado su decimocuarta edición de su informe Doing Business 2017: Igualdad para Todos. Estos informes tratan de medir la facilidad para hacer negocios en 190 países basándose en una serie de indicadores cualitativos que favorecen o restringen la actividad empresarial, como las regulaciones empresariales y la protección de los derechos de propiedad.

De este estudio se desprenden varias conclusiones interesantes. Entre ellas, que las diferencias entre países son cada vez más acentuadas, y nuestro país, como casi siempre, no queda bien parado en este ranking. Así, mientras en países como Suecia o Eslovenia tan solo se necesitan dos trámites burocráticos, en España se necesitan siete. Esta circunstancia hace que nuestro país sea uno de los que más se tarda en emprender de Europa.

En la parte destacada del ranking se sitúan los países que casi siempre están a la cabeza del emprendimiento, como Nueva Zelanda, Singapur, Hong Kong o Corea del Sur. A nivel europeo, no existen diferencias significativas con respecto al año pasado, siendo Dinamarca en el puesto tercero, Noruega en el sexto, Reino Unido (7º), Suecia (9º) y Macedonia (10º). España, por su parte, se queda en el puesto 32º, justo por detrás de Eslovenia y de nuestros vecinos franceses (29º) y portugueses (25º) y por delante de Suiza.

En la parte baja del ranking se quedan varios países africanos y otros americanos y asiáticos como Venezuela o Afganistán, que destacan negativamente por su escasa seguridad jurídica, sus impuestos altos y, especialmente, por su corrupción.

El estudio se basa en una serie de indicadores cualitativos para hacer el ranking. Entre ellos, destacan la facilidad para constituir un negocio, la facilidad para gestionar los permisos, el acceso a los suministros básicos de electricidad, agua y gas, la facilidad para el registro, la facilidad para obtener financiación, la protección a los inversores minoritarios, el pago de impuestos, la facilidad de importar/exportar, la gestión de las insolvencias y la seguridad en los contratos.